Le habían dicho que era una de las puestas de sol más bonitas del mundo. Y se lo creyó sin decir ni mú. Acudió con la ilusión de una niña que sabe que algo grande le está esperando.
La primera vez llegó tan tarde que sólo escuchó los aplausos de las personas mucho más puntuales que ella, que emocionadas, no paraban de gritar cuando por fin el sol se ocultó.
La segunda (y última) vez también llegó tarde. El espectáculo -gratuito- estaba allí delante. No pudo hacer otra cosa que fotografiar a quienes le fotografiaban sin parar.
Nunca sabrá si fue por no haberse hecho con un sitio preferente, por no llegar a tiempo, por sentir que ése no era su sol, o porque nunca es bueno que te dan tan buenas referencias, pero lo cierto es que aquella no fue la puesta de sol más bonita de su vida.
Ni mucho menos.
13 comentarios:
Puede que fuera el sentir que ese sol, quizás no fuera para ti sola...
Me gusta que el sol brille para todos, Caboblanco.
¡¡Pero no que todos tengan la misma foto que yo!!
Cuánta razón tienes.
Por lo que sea sucede que lo que a todos les parece de una manera para ti es de otra.
No hay mejores puestas de sol que las que ve uno solo o en agradable compañía.
Lo mismo que no hay mejor postal que la que hacemos nosotros aunque la que venden parezca superarla.
Un beso.
Que te hablen muy bien de algo hace que aumenten las expectativas y que no resulte como esperabas. Y cuando algo pasa a ser "propiedad" de muchos pierde su valor.
Besos.
A veces cuando esperamos tanto, es fácil sentirse decepcionado...
Besos inesperados.
Puestas de sol tras unas vacaciones...
Si es el mismo sol, entonces sólo cambia el horizonte, y tal vez, sea eso... o será el tiempo??? o será la compañía??? o será la distancia??? o seremos nosotros???
Me alegro de que estés de vuelta, aunque eso no te sirva de consuelo en la vuelta a la monotonía
Pero ten por seguro que habrá una tercera puesta de sol, y estará en primera fila y ni siquiera se dará cuenta que está rodeada de gente. La puesta de sol ha sido para ella.
siempre está por venir...besos
La puesta de sol que sea para ti, y sólo para tí, la reconocerás al instante, aunque haya una multitud contigo.
También es placentero vivir una puesta de sol a través de las emociones de los demás, nos complementan y nos ayudan a quererlos más.
A mi me gusta más cuando hay luna llena...era nuestra contraseña.
Aún así y a pesar de que parece que ya no hay más lunas llenas...siempre me emociono cuando la veo brillar tan inmensa en el cielo.
Esos días también había una enorme luna llena en el cielo.
A mí también me gusta especialmente.
Besos lunáticos.
Sin duda que no lo es, viendo todos los maromos (y maromas) que había delante. Subscribo lo dicho por Ybris al respecto.
Es lo que pasa con las expectativas.
Gracias y un beso
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