domingo, diciembre 31, 2006

El último

Éste es el último post del año.
Un año al que despido con un sabor agridulce.
No ha sido un año malo. Tampoco excesivamente bueno.
Otro año de intensidades. De cosas muy buenas y también muy malas. De esfuerzos. De esfuerzos inútiles. De querer hacer. De caminos incompletos...

Termino este año con una sonrisa. La mía. Y con un propósito: el de ser, a partir de ahora, un mucho más egoísta de lo que he sido hasta ahora. En otras palabras, pensar en mí.

Dejo en este 2006 muchas ilusiones, alguna que otra persona, más de un objetivo, deseos que no alcancé. Me deja este 2006 alguna que otra arruga en mis ojos, un par de cicatrices en el alma, sentimientos a flor de piel, y muchas (demasiadas) preguntas sin contestar.

Termino el año peor que lo empecé. Un año en el que me acostumbré a ser sombra, en el que me gané el cariño de mucha gente, en el que me creí tus tequieros y te los devolví cocidos a fuego lento para que no se te escaparan, en el que sonreí mil y una veces creyéndome sol a pesar de ser luna, en el que me dije otras mil veces esto no puede seguir así, en el que por fin entendí que Caperucita nunca puede hacerse amiga del lobo, en el que me dijeron quédate a mi lado cuando yo ya había decidido salir corriendo, en el que ahogué mis penas con amigos que saben cómo estoy con solo mirarme; pero sobre todo, el año en el que me miré en el espejo sin tener que salir huyendo porque me gustaba lo que veía.

Quedan menos de 24 horas para que termine un año que quiero que termine cuanto antes. Un año de lecturas, de escritura, de tantos y tantos blogs que me han enseñado, ayudado y acompañado. Otro año de una verdadosa que tiene cuerda para rato, aunque reconozco que hace pocas semanas pensé en cerrarla definitivamente. Una experiencia fascinante con un marcador al que miro tímidamente para ver alucinada que ha contado más de 26.400 visitas, y subiendo.

Un año de tantas y tantas horas invertidas en un trabajo que me gusta pero que en muchos momentos me tiene esclava. De personas que no siempre han sabido estar en su sitio, y de otras que se han esforzado en ponerme siempre las cosas lo más fáciles posible.

Un año de fuerza de voluntad, de no tirar la toalla (eso jamás), de si tú me dices ven lo dejo todo, de mucho aprendizaje, de soledades y ausencias, de soledades y audiencias de las que se clavan en el alma y no se olvidan, de risas y carcajadas, de equilibrio a pesar de todo.

El otro día alguien me dijo que al cumplir los 35 cerraba un ciclo de siete años. Hoy sólo pienso en inaugurar este 2007 que ya está encima y dejarme engatusar por todo lo que quiera depararme. Ojalá sea bueno...

Feliz Año Nuevo a todos vosotros.

Salud.

jueves, diciembre 28, 2006

Carta de amor

Era el mes de septiembre. Tenía una semana de vacaciones. Un día, en el buzón, recibí una convocatoria de un concurso de escritura. Había varias categorías. Me presenté a microrrelato y a carta de amor.
Curiosamente, la carta me salió con tintes a desamores. Se la di a leer sólo a dos personas. Una de ellas me dijo que había mucho de mí en aquellas letras.

Hace dos días me han comunicado que esa carta de amor ha ganado el tercer premio del concurso.
Ahí os la dejo...

"Ésta podría ser tu carta de amor. Porque un día me dijiste que todos deberíamos tener el derecho a recibir, al menos, una carta de amor al año.
Pero no te preocupes. Me has hablado mil veces de tus miedos al amor. Por eso, ésta no va a ser la tuya. Permíteme que me la escriba a mí misma. Aunque en el remite cambie a última hora mi nombre por el tuyo.


Jugamos a mezclar el fuego de mis ojos con el acero de tu mirada, el cielo al que me acostumbré a viajar con ese infierno de todo a cien que te empeñabas en mostrarme, mis manos ardientes al contacto con tu piel con las tuyas que me manejaban a su antojo. Tus mundos y los míos.

Me encuentro buceando entre el amor y el desamor. Y no sé si debo escribirle al adiós o a la indiferencia. Dicen que entre el amor y el odio hay una barrera tan delgada como la piel de una burbuja, pero no encuentro ese camino.

Siempre creí que una carta de amor debía estar cargada de tequieros, de deseo, de estrellas... Al menos sé que has aprendido a entenderme. Que en esta carta, aunque no lo leas, está todo esto.
Sobre todo, deseo. Y afiladas palabras que tendrás que digerir tú solo. Esas que un día me dijiste que usaba con la misma facilidad con la que un cirujano utiliza su bisturí.


Quizá no debería escribir esta carta. Porque con ella vuelvo a decir sin que me oigan, sigo escribiendo para que no me lean. Intento explicar para no hacerme entender.

Los dos sabemos que la necesidad no tiene nada que ver con el amor, ni la piel con el corazón. Que el abecedario de caricias no comparte códigos con el alfabeto de nuestras bocas, que ni tan siquiera el significado de tus palabras coincide con el de las mías.
Y aquí me tienes. Deshojando todo lo que encontré a mi paso, buscando un sí pero hallando un no, pidiéndote permiso para instalarme dentro sin ganas ni tiempo para encontrar la casilla de salida. Encontrándote sin buscarte, respirándote sin olerte. Con mi maleta ya gastada repleta de felicidades a una sola banda a la que se me olvidó echarle el candado aunque en realidad nunca tuvo llave.
Una llave para abrir, no para cerrar. Para abrirte a mi sombra y diseccionarte a mi gusto, para mí sola. Verte y descubrirte.

Ése será el día en que pueda escribirte tu carta de amor. La que estará llena de palabras maceradas en almíbar y adornada con caricias de algodón. La que tampoco llegaremos a creernos.

Mientras tanto, hoy me escribo, te escribo".

miércoles, diciembre 27, 2006

El poder inexorable del tiempo.

¿Para qué sirven 5 minutos?

Por ejemplo, para ver las cosas más claras.

Incluso más bonitas.

jueves, diciembre 21, 2006

Gritar

Hay una cosa que no soporto: los chismes, los equívocos, las trampas. La mala idea.

Por eso no puedo permitir que nadie hable por mí o que se haga pasar por mí. Yo, que siempre hablo a las claras y mirando a los ojos (aunque eso pueda ser considerado por muchos como un error) me siento muy orgullosa de ese aspecto de mi personalidad.

Lo que he dicho, lo mantengo.
Nunca hablo a las espaldas de nadie. Siempre voy de frente.
Pero lo que no he dicho (ni escrito) no tengo por qué asumirlo yo.

Me encantaría gritar ¡Estoy harta, mi paciencia se ha terminado!
Pero éste es un sitio demasiado bonito para gritar.

martes, diciembre 19, 2006

Un día cualquiera

Hoy:

Me he sentido feliz por el trabajo bien hecho.

He comido en un restaurante turco, saboreando a tope esos dos pastelitos de miel y pistachos que tanto me gustan.

He salido corriendo por la calle Alcalá.

Me he decepcionado con la primera llamada del día.

Me han dado plantón.

Me han llamado imprescindible.

No he tenido tiempo para escribir.

He recibido la primera tarjeta de felicitación navideña, no virtual.

Me he reído a carcajadas, olvidándome de las patas de gallo.

Me he encontrado con un antiguo compañero de trabajo en mi oficina.

He dado un beso al aire.

Me has llamado para contarme tus penas.

No me han hecho partícipe de otras penas.

He estado en esa casa en la que hace tanto que no entraba.

Me he peleado con la tecnología.

Entendí regalito cuando me dijeron recadito.

He escuchado la misma canción en el coche doce veces.

Hoy... volveré a dormir sola.

lunes, diciembre 18, 2006

Reflexión

Apuro mis últimos días con 34.
Agoto las ilusiones antes de que llegue el momento.
Corro para conseguir los pocos objetivos que me marqué hace ahora un año.
Escucho mucho. Hablo menos.
Miro a mi alrededor como lo hacen los niños. Alucinados.
Y espero.

Saco a pasear mis esperanzas. Sólo de vez en cuando.
Las abrigo para que no se constipen.
Porque me da miedo que luego nadie pregunte por ellas.
¿Tan difícil es decir qué tal estás?
Observo. Y espero.
Aunque cada vez espero menos.

Colecciono momentos inolvidables.
Me visto de Caperucita para atraer al lobo.
Siempre me han gustado los feroces.
Y me apellido la valiente, sólo porque me gusta.
Porque un día sin venir a cuento, durante este año que ahora acaba, llegando a una fiesta casi de extrangis, alguien que sabía quien era pero que nunca había cruzado ni media palabra conmigo, me saludó con ese preciso "Tú eres R. la valiente", al que acudo con frecuencia cuando esa valentía me ha dejado plantada de mala manera (sí, me gustan las frases largas).

Los años pasan.
Algunas cosas cambian.
Las personas, nunca.
En todo caso, para mal.

Eso dicen.
No termino de creérmelo.
Mientras tanto, yo espero.
Aunque cada vez menos.
Creo que eso ya lo he dicho.

domingo, diciembre 17, 2006

Adicción

¿Por qué será que todo lo bueno crea adicción?

El chocolate.
La comida.
Los besos.
El mar.
La buena vida.
Viajar.
Los libros.
La fantasía.
Vivir.
Las caricias.
Dormir.
Enamorarse.
El sexo.
¡Tantas cosas!

Y a ti, ¿qué te crea adición?

jueves, diciembre 14, 2006

Frívola

Los 5 secretos de una mujer feliz:

1.- Es importante encontrar a un hombre que comparta contigo la responsabilidad y las tareas del hogar, y que tenga un buen trabajo.

2.- Es importante encontrar a un hombre alegre, que disfrute del baile, los paseos, y que te haga reír.

3.- Es importante encontrar a un hombre tierno, de quien se pueda depender afectivamente sin que por ello te subordine, y además, que no mienta.

4.- Es importante encontrar a un hombre que sea buen amante y que adore tener sexo contigo.

5.- Es MUY, pero MUY IMPORTANTE, que estos cuatro hombres NO se conozcan entre sí.

martes, diciembre 12, 2006

Un bonito verbo

Me gusta amar a través de la admiración.
Me gusta que me amen por los caminos del respeto.

Me gusta amar por lo que dicen nuestras pieles.
Me gusta que me amen a través del deseo.

Me gusta amar desde la confianza.
Me gusta que me amen con libertad.

Me gusta amar con el corazón.
Me gusta que me amen de forma original.

Me gusta amar apasionadamente.
Me gusta que me amen irracionalmente.

Me gusta amar también desde la sensatez.
Me gusta que me amen con descaro.

Me gusta amar con sabor a compromisos.
Me gusta que me amen a ritmo de boleros.

Me gusta amar.
Me encanta que me amen.

lunes, diciembre 11, 2006

Hasta siempre

La muerte siempre nos pilla en mal momento.
Sobre todo, la muerte de las personas a las que queremos.
Sobre todo, la muerte de los que son especiales.
Sobre todo, la muerte de aquellos a los que echaremos de menos.
Sobre todo, cuando te llaman a las once de la noche para decirte que se ha muerto la persona con la que te has estado tomando unas cervezas el día antes.

La vida es caprichosa, injusta en ocasiones.
"La vida es un regalo", me decían ayer.
Hasta que deja de serlo, supongo.

La muerte nunca nos pilla en un buen momento.
Mucho menos cuando quien se va es un amigo.
Te echaremos de menos, E.

domingo, diciembre 10, 2006

De viaje

Siempre he pensado que todo viaje tiene algo de huída, de escape.
Afortunadamente, no huyo de nadie. A estas alturas, ni de mí misma. Pero sí de ciertas cosas. Todos huímos de algo...

Un paréntesis.
Una pequeña escala.
Parar por necesidad.
Por deseo.

Un viaje donde la distancia física se vuelve terapéutica.
Un vuelo para alejarme de todo lo que me duele, de lo que sangra.
Unos días para enamorarme.
De mí misma, sí.
Para gritarle al mundo. Sin miedo.
Y sonreír al sol, que no me da tregua.
O llorar mirando a la luna, intensa siempre. Mágica.

La felicidad tiene ecos.
La infelicidad produce resaca.
Paseo entre esas voces dulces y ese maldito mal sabor de boca.
Tejiendo vida.
Respirando amores.
Imaginando paraísos.
Deshaciendo fantasías.
¿Qué es sino la vida?

Para algunos simple huída.
Siempre lo he pensado. Todo viaje tiene algo de eso.
Y hoy, además de pensarlo, así lo siento.


lunes, diciembre 04, 2006

El valor del tiempo

Hay que ver lo rápida que pasa la vida,
lo rápido que pasan los años,
lo rápido que pasan los meses...

.. y lo larga que puede llegar a ser una semana.

Hay que ver.

sábado, diciembre 02, 2006

Otra vez yo

El eco de tus besos,
la resaca de tus caricias,
el sabor dulce de tu boca
y la orilla de tu piel.

Imagino.
Recuerdo.
Pienso.
Deseo.

Esos secretos no compartidos.
Esos misterios amontonados bajo mis sábanas.
Mis intimidades.
Las tuyas.
Las nuestras.

Imagino.
Recuerdo.
Pienso.
Deseo.

Quizá sea la hora a la que escribo.
O las ausencias.
Mis necesidades.
El motivo por el que veía salir el sol.
Un camino hacia la felicidad.
Largo. Difícil.
Pero camino al fin y al cabo.

Imagino.
Recuerdo.
Pienso.
Deseo.

viernes, diciembre 01, 2006

Hoy

... Hasta que un día te levantas y, de repente, te das cuenta de que te has quedado sin palabras.

jueves, noviembre 30, 2006

Tanto y tan poco

Tengo tanto que decir...


que no sé por dónde empezar.

miércoles, noviembre 29, 2006

Piensa en verde

















Porque es el color de la esperanza.

Porque verdes son mis ojos.

Porque verde que te quiero verde.

Porque a todos nos gusta ser un poco verdes.



(Foto: FJ González Catalán)

domingo, noviembre 26, 2006

De mudanza

Me he dado cuenta de que tengo una colección de noes,
un álbum repleto de dudas salpicado de mentiras,
un cofre lleno de reproches, en vez de tesoros,
una paleta embadurnada de soledades, donde debía haber colores.

Me he dado cuenta de que tengo una caja adornada con indiferencias,
un cajón que rebosa egoísmo que no es mío,
un cuento lleno de fantasmas, en vez de héroes,
una canción de chicle, desafinada y triste.

Me he dado cuenta de que el sol está en mi cara.
Poderoso.
Me he dado cuenta de que es tiempo de mudanza.
¡Qué pereza! Con lo poco que me gustan las mudanzas.


Me he dado cuenta de que puedo mirar al mundo con la cara bien alta.
Aunque hoy prefiera cerrar la puerta y esconderme.
Para que nadie me vea.

jueves, noviembre 23, 2006

¡Estoy embarazado!

El otro día comentaba que una de las cosas por las que te das cuenta que ya eres mayor es que nadie te pregunta qué quieres ser de mayor.
Pero hay otra circunstancia que, por si aún no te habías dado cuenta de que eres rematadamente mayor, no deja lugar a dudas. Tus amigos/as están embarazados/as. (Y lo malo es que en muchos casos van por el segundo incluso por el tercero).

Hoy me han dado la feliz noticia dos buenos amigos. Uno, espera impaciente a una niña chinita aunque aún no le puede poner fecha a la feliz llegada después de largos meses de duros trámites. Al otro, le esperan los ocho meses más felices de su vida.

A los dos les he felicitado con un beso sincero y rotundo. Pero supongo que ninguno de ellos se ha dado cuenta de que una pequeña lágrima ha estado a punto de asomar de mi ojo izquierdo.

Como a los amigos no se les puede envidiar, hoy prefiero compartir su felicidad con ellos. Y brindo en voz alta por esas dos noticias tan deliciosas, por esos dos corazones que ya han empezado a latir y que hoy han hecho que el mío fuera un poquito más rápido.

¡Salud!

miércoles, noviembre 22, 2006

Me gusta

Me gusta cuando te quedas.
Cuando bordeamos el sol con las palabras.
Me gusta cuando viajamos hasta la luna sin esfuerzo.

Me gusta tu zumo de nada.
Tu boca de desayuno.
Tus llamadas de poca cortesía y mucho descaro.

Me gusta encontarte despierto.
Y respirarte entre sueños.
Me gusta tu piel hecha mi pijama.

Me gusta lo que me dices, cuando me lo dices.
Me gusta cuando callas, si lo que callas es lo que quiero oír.

Me gusta ese paseo a la locura.
El rally que dibujo por tu cuerpo sin curvas desconocidas.
Me gusta mi sonrisa frente a la tuya.

Me gustan las burbujas que no están en la botella.
Las caricias que no son enlatadas.
Las estrellas que no salen de noche.

Me gusta

lunes, noviembre 20, 2006

Vocación

Una de las cosas que te hacen ver que eres mayor es que, de repente, nadie te pregunta qué quieres ser de mayor.
Debe ser por eso por lo que ya nadie me lo pregunta. Pero si hoy alguien me preguntara qué quiero ser de mayor, lo tendría claro.
Contestaría que de mayor quiero escribir tan bien como él:

“En el principio hízose la noche: una noche falsamente eterna que nunca se convierte ni siquiera en madrugada, por lo cual, el día primero, Dios Nuestro Señor (además de crearse a sí mismo) crea el día y, como el palizón le deja agotado, tiene tanto sueño que no se aclara y se echa a dormir, actividad que le ocupa hasta el día sexto, en que se despierta y, deprisa y corriendo, tiene que crear el universo, el ancho mundo, los vegetales, los animales, los homínidos, la física nuclear y los fantasmas, que (como son tan alocados) se dedican a pintar el cielo de color azul, porque habéis de saber que en un principio (es decir: las cinco primeras jornadas) el cielo era de color verde, razón por la cual se confundía muy a menudo con los prados de césped, a los cuales, a su vez, les parece ahora monótono llevar una existencia tan verde, y se tornasuelan en bellas gamas de colores que vuelven locos de envidia a los arcos iris, los cuales, para no ser menos, adoptan la forma de figuras geométricas: cuadrados, triángulos, cubos, cilindros y, sobre todo, pirámides, que asombran a los faraones egipcios, personajes sumamente enamoradizos que deciden tomarlas bajo su tutela, cosa que las entristece sobremanera y las hace adoptar esa coloración polvorienta, producto de la tristeza y las lágrimas derramadas sobre el Nilo, que a estas alturas no es todavía un río sino un torrente bordeado de pitas, y con un quiosco de bebidas novecentista donde un señor vestido de gris pide el juego del parchís, y un señor chapucero pide el salero, y un tranviario desconocido pide una cabeza de burro con cocido, y una puta con bigote rubio pide pan con tomate en el Vesubio, y un chavalito progre con melena pide vino blanco en la cena, y un gitano orejudo pide un aviador cornudo...”


LA CREACIÓN, Quim Monzó.


Y ahora tú, ¿qué quieres ser de mayor?

domingo, noviembre 19, 2006

Shakespeare se equivocó

Olvidar o no olvidar..., esa es la cuestión.

viernes, noviembre 17, 2006

Una noche en la ópera

Hace unos días escribí un post que comenzaba así: "Como hace mucho tiempo que nadie me da una sorpresa, la propia vida (que cuando quiere es sabia) se encargó de dármela ella misma..."

Era una historia bonita. Sin embargo, no lo publiqué. Se quedó en la carpeta de borradores. No sé muy bien por qué.

Qué casualidad que a los pocos días, por fin alguien me da una sorpresa. Sucedió ayer. Una llamada a media tarde me preguntaba si saldría pronto de trabajar. El plan: ir al teatro.

- "¿Qué vamos a ver?"
- "Ya sabes que no me gusta que me preguntes tanto. Déjate llevar".
- "Ya, pero ya sabes tú también que yo soy muy curiosa".
- "No seas pesada. Hmmm... al Albeniz. Vamos al Albeniz".
- "¿Y qué ponen?"
- "Algo bonito".
- "Bueno, vale, ahora nos vemos".
- "Pero sobre todo, no te retrases. No podemos llegar tarde. Es un estreno importante"


En Madrid llovía. El tráfico estaba fatal. La mejor solución: ir en metro.
Nos bajamos en la estación de Ópera. Me empecé a extrañar. Y tiramos hacia una dirección inequívoca. Allí estaba el Teatro Real, no el Albéniz.

- "Jo, parece que vamos al Teatro Real".

Nos acercamos a la puerta del Real.

- "Anda, entra".

Mi emoción se dispara. Nunca había estado en el Real. El cartel anuncia "El amor de las tres naranjas", una ópera de un autor ruso.
Subimos unas escaleras. Estamos en un palco ¡En uno de los mejores del teatro! A mi lado, un escritor muy popular que me saluda con un afectuoso Buenas tardes.

No sé por qué pero me acuerdo de Julia Roberts en Pretty Woman, cuando rompe a llorar en medio de la ópera que está viendo de purita emoción. Echo de menos que la ópera que me toca a mí no sea de amor. No voy a poder llorar.

Aunque reconozco que la ópera no es un género que me llene del todo, estar allí es todo un espectáculo. Maravilloso. La escenografía, la orquesta, los más de sesenta personajes que me da tiempo a contar en un mismo momento sobre el escenario, las personas que asisten al Real (interesante mezcla: unas en vaqueros, otras vestidas casi de gala), el vestuario, la música...

Ayer pasé dos horas geniales escuchando ruso. Y reconozco que en un momento dado, dejé de mirar la pantalla de la traducción porque no me hacía falta para entender la historia sin tener ni papa de ese idioma.

Disfruté mucho ayer. Y se lo debo a quien, desde hace mucho tiempo, no deja de sorprenderme. Para lo malo, y como anoche, también para lo bueno.

jueves, noviembre 16, 2006

Ilusión

Un día, hace mucho tiempo, me enamoré de una ilusión. De algo parecido a un sueño, quizá más cerca de una utopía.
Claro que eso lo supe años después, cuando pude mirar aquello con la frialdad que da el paso del tiempo.

Bebía de una fuente más bien seca, inventaba palabras inexistentes, me enfrentaba a sombras que me asustaban más que me sorprendían, subía montañas fantasma de esas que no tienen fin.
Pero tenía ilusión. Y ganas. Aunque a veces ni la ilusión ni las ganas sean suficiente.

Hoy no quiero eso. Hoy no quiero enamorarme de un sueño que sólo disfruto yo. Hoy quiero enamorarme de una persona, de un hombre, de un nombre, de una cabeza, de un cuerpo, de un corazón...

miércoles, noviembre 15, 2006

Todo pasa

Es cierto que el tiempo lo cura todo.


... Incluso lo bueno.

lunes, noviembre 13, 2006

Roja, sí

Siempre prefiero mil palabras a una imagen.
Casi siempre prefiero quinientas palabras a una imagen.
Muchas veces prefiero cien palabras a una imagen.
Algunos días prefiero diez palabras a una imagen.
En ocasiones, incluso prefiero un par de palabras a una imagen.

Esta noche prefiero una imagen. Ésta.





Gracias, Sangre

domingo, noviembre 12, 2006

Ángeles

De pequeños nos enseñaron que los ángeles de la guarda existían. Crecimos, y como de tantas otras cosas, nos desengañamos enseguida.

Pero hoy, por las escaleras, me he topado con uno de ellos.
Es lo bueno de crecer. Que descubres que nada es eterno.
Que las verdades que dejaron de serlo, finalmente se convierten en realidad.
Aunque los ángeles no tengan alas.

viernes, noviembre 10, 2006

Deseo

Mis manos bailando sobre tu piel.
Mi pelo derramado sobre tu sonrisa
Dos cuerpos navegando en el mar de la vida.
Tus dedos buscando un escondite.
Tus ojos comprando un billete al paraíso.
Coreografías mil veces ensayadas.
Descaro.
Prisa. Urgencia.
Destellos tambaleándose en el aire.
Inventando el todo desde la nada.
Fabricando amores efímeros pero inolvidables.
Bebiéndonos con fuerza.
Con dulzura.
Susurrando al infinito que no se acabe nunca.
Convierto tu cuerpo en un puzzle en el que poner un poco de orden.
Desordeno tus fantasías.




Conozco un camino a la felicidad.
Deseo.

jueves, noviembre 09, 2006

Sigo...

A mi último post, alguno de vosotros ha respondido con otra pregunta. ¿Por qué escribes?
Y como a mí me gusta que me respondan, pagaré con la misma moneda... aunque no tenga tan claro por qué lo hago.


Porque, en muchos casos, es una válvula de escape. Una ilusión, una razón para sonreír. A veces, no sabéis hasta qué punto.
Para intentar aprender. Con vosotros, de vosotros.
Obviamente, porque me gusta escribir. Porque lo llevo haciendo desde que era pequeña y forma parte de mi vida. Tanto, como respirar.
Porque me ayuda a canalizar mis dudas, mis miedos. A punto de cumplir los 35, soy una mujer vulnerable, sí. ¿Y qué? Dudo. Ultimamente, mucho. Me muevo en un hilo de acróbatas. Y me caigo. Pero afortunadamente, siempre hay alguien ahí para recogerme y curarme las heridas. Ojalá me gustara mirarme el ombligo. Ojalá.

Mi enorme curiosidad, sumado al magnetismo que me produce este apasionante mundo del blog, me ha llevado a querer saber algo más de los que pasáis a menudo por aquí. La intención: aprender, mejorar (me), evolucionar. En una palabra, crecer.
No ha sido una cuestión de ego en absoluto. Obviamente, me gusta leer lo bueno. Pero he querido saber también lo malo. Vuestras impresiones. Las más dulces, pero también las menos buenas.
Ya he comentado en otras ocasiones que me gustan los mensajes anónimos. Porque por encima de todo, me gusta jugar. Y los que más me conocéis, sabéis que también provocar. Que me provoquen. Así son las normas del juego. Yo escribo lo que quiero, vosotros exactamente igual. Aunque alguien haya borrado su propio comentario. Jamás censuraré ninguna palabra. Dicen que nunca hay que decir jamás. Y el día que no pueda expresar aquí lo que de verdad siento, cerraré este blog.

Hay días en los que es difícil escribir. Otros, resulta que la inspiración está de vacaciones, o de huelga no anunciada, o de boda. O te ha mandado a hacer puñetas. Yo qué sé.
A veces las palabras se te hacen pequeñas, inservibles para decir todo lo que querrías decir.
Supongo que siempre hay entrelíneas.
Hay días para la frivolidad. Otros, para las intensidades.
Hay días vacíos, muchos.

Hay días en los que soy muy pequeña.
Hay días en los que me siento grande.
En todos ellos intento escribir. Aunque no siempre lo consiga.

Escribo porque me hace feliz.
Y os agradezo a todos vuestras respuestas. Todas me han servido. De todas he aprendido algo.
GRACIAS.

martes, noviembre 07, 2006

Por curiosidad


¿Por qué me lees?

domingo, noviembre 05, 2006

Pedir perdón

Leyendo el nostálgico artículo de Javier Marías en EPS de hoy, "Los antiguos amigos", me entero que fue él, junto a Gustavo Pérez de Ayala, el enargado de corregir la traducción argentina del libro Love Story.

Se reprocha Marías haber sido los responsables de lo que él llama "la formulación española de la muy ridícula frase convertida en lema de enamorados durante una larga temporada: AMAR SIGNIFICA NO TENER QUE DECIR NUNCA LO SIENTO".

Yo era muy pequeña la primera vez que vi aquella película. Sin embargo, siempre me pareció una estupidez la frase, esa que ahora Javier Marías define como insensata y cursi.
Me preguntaba, con esa ingenuidad permitida a los muy jóvenes, que por qué no se podía decir lo siento a los que más queríamos.

Han pasado muchos años desde entonces. Afortunadamente, la ingenuidad no me ha abandonado definitivamente, pero sigo pensando que pedir perdón es una de las cosas que más honran al ser humano. Y más aun, cuando se lo decimos a las personas que nos importan.


Si rectificar es de sabios, pedir perdón es de gente noble.
Y si alguien que nos quiere nos pide perdón, perdonarlo es un ejercicio maravilloso.

sábado, noviembre 04, 2006

Mentiras del lenguaje

(Algunas)

Envidia sana.
Hasta que la muerte nos separe.
A la tercera va la vencida.
Mentiras piadosas.
Lo que yo te diga.
Sí.
No.
La arruga es bella.
El tamaño no importa.
No hay dos sin tres.
Una imagen vale más que mil palabras.
Venganza dulce.
Divorcio amistoso.
Amor incodicional.


Hay tantas...

viernes, noviembre 03, 2006

Ciclos

Viajan las ilusiones escondidas bajo llave.
Hasta que alguien las destapa.
Es entonces cuando explotan.
Mantenerse. ¿Hasta cuándo?
Hasta que vuelve el sereno con su manojo de llaves en la mano.
Para de nuevo encerrarlas.


Viajan los deseos bajo la piel.
Hasta que alguien los desata.
Es entonces cuando nos creemos estar vivos.
Permanecen. ¿Hasta cuándo?
Hasta que llega el viento frío que arrasa todo el fuego con el que tropieza.
Para de nuevo sobrevivir, en lugar de vivir.

lunes, octubre 30, 2006

Ayer

"En la mesa y en el juego se demuestra un caballero".

No soy muy amiga de los refranes, pero a veces no tengo más remedio que dejarme seducir por ellos...



(Dedicado a todos aquellos que en vez de jugar, prefieren ganar.
En especial, a los que quieren ganar abusando del contrario.
Y en concreto, a los que necesitan ganar en la pista lo que no ganan en la vida).

viernes, octubre 27, 2006

Pues eso...



.....................Queda claro, ¿no?

miércoles, octubre 25, 2006

De mayor quiero ser frívola

A propósito de mi penúltimo post (el del famoso reportaje sobre los estereotipos masculinos), un amigo mío me ha regañado diciéndome que no era verdad que yo entendiera mucho de hombres. Ya sabes, aquello de “dime de qué presumes...”

Le dije que todo fue un juego, una provocación (otra más), un post frívolo que tampoco viene mal.
Me contestó que si de verdad me quería poner frívola debía hablar de tetas, culos y orgamos.

Aprovecho la ocasión para decirle que ni las tetas ni los culos ni los orgasmos me parecen temas frívolos.

De las tetas y los culos no tengo mucho que decir, la verdad. Intento llevarme bien con unas y otro. Somos algo así como un trío de hecho en régimen de gananciales. No nos va mal.

Y en cuanto a los orgasmos, soy de las que piensa que mucho mejor que describirlos con palabras es... sentirlos.

martes, octubre 24, 2006

Misterio

Empecé a trabajar en la radio hace muchos años, siendo muy joven. Estudiaba tercero de carrera.
Recién llegada al mundo profesional, uno de los grandes me dijo que una de las recetas más infalibles para que una mujer atara en corto a un hombre era ofrecerle una cuarta parte de misterio y tres cuartas partes de fascinación.

Muchos años después lo leí en uno de sus libros, cuando comparaba el amor que sentía por la radio con el de una mujer.

Y sí, reconozco que me gusta el misterio y que lo cultivo. Lo intento mantener en todas las circunstancias, no sólo con los hombres.

Pero hoy, no sé por qué, me ha dado por pensar que quizá tanto post acabe con ese pequeño tesoro llamado misterio...

lunes, octubre 23, 2006

Hoy, trapo rojo

Leo un reportaje de un dominical, entre divertida y alucinada, titulado "25 claves para entenderles". El subtítulo avisa: Un gabinete de expertos nos ayuda a comprobar si los estereotipos sobre los hombres son ciertos.
Y yo, que de hombres sé un rato pero que últimamente me tienen algo despistada, voy y me pongo a ello. A comprobar si los estereotipos son ciertos...

Para quien no haya tenido a bien leer el reportaje, os contaré que en él se formulan 25 preguntas (pues sí amigos, no soy yo la única que pregunta) de la talla de:

¿En qué piensa cuando dicen que en "nada"?
Con los amigos, ¿sólo hablan de sexo y fútbol?
¿Por qué no recuerdan los aniversarios?
¿Necesitan demostrar que pueden hacerlo todo?
¿Les preocupa el tamaño de su virilidad?
¿Son infieles por naturaleza?
¿Qué es lo que más les excita?
¿El coche es su verdadero y único amor?

... Llegado a este punto, vuelvo a la primera página para mirar quién lo firma. Lo que me imaginaba: está escrito por una mujer.

Si éstas son algunas de las preguntas, imaginaos las respuestas. Algunas, tan eruditas como su propio enunciado. Pero curiosamente, la mayoría (ya lo avisaba el subtítulo) son dadas por expertos (hombres), que me imagino se conocen muy bien entre sí.

Os dejo algunas perlas, que yo, que de hombres sé un rato, todavía estoy dándole vueltas.

"Ante un partido de fútbol o una película de acción, consiguen abstraerse completamente del mundo".
"La mayoría de las veces, con los amigos hablan de sexo y fútbol. Otras, de coche y de política".
"Aceptar consejos femeninos es asumir que ella puede ser más inteligente".
"No recuerdan los aniversarios porque tienen poco interés en hacerlo".
"Sólo se sienten padres tras el nacimiento".
"A la hora de dar y recibir placer erótico, el tamaño no importa".
"El hombre suele tener más parejas y darle mayor importancia al sexo que la mujer".
"Los hombres se excitan por la vista".
"En lo primero que se fijan los hombres es en los senos de una mujer".
"Lo que más les molesta de una mujer es que les critiquen su falta de habilidad en el sexo".
"Mientras que la mujer busca hombres inteligentes, a ellos les atrae más encontrar parejas que se asemejen a sus madres y que los apoyen en casa antes de ir a trabajar".

Y ya paro que no quiero ponerme pesada. Prometo que tanto las preguntas como las respuestas son literales.
Ahí lo dejo... Pero me encantará saber lo que piensas.


(Dedicado a quien esta mañana me ha recordado lo mucho que me gustan los capotes, pero sobre todo las muletas).

domingo, octubre 22, 2006

Error de envío

El otro día iba con un amigo en el coche. Recibí un sms de una amiga para ver si esa noche me apuntaba a irme de fiesta, como habíamos hecho la noche anterior. De inmediato la contesté que no podía porque ya había quedado. Además, le hacía un repaso rápido a lo bien que nos lo habíamos pasado hacía unas pocas horas.
No sé en qué estaría pensando, que en vez de mandárselo a ella se lo envié al amigo que iba a mi izquierda conduciendo. No era un mensaje comprometido, pero no me apetecía que él lo leyera.
Así que, una vez que me di cuenta de la metedura de pata, le dije que por favor lo borrara y no lo leyera, que no era para él.

Mi amigo, ni corto ni perezoso, en vez de borrarlo de inmediato, y después de leerlo (lo sé porque es alguien a quien conozco muy bien y sé que disfruta tomándome el pelo siempre que puede. Su sonrisa le delató), me dijo que no le había llegado. Dio el tema por zanjado.

A todos nos puede la curiosidad. Es difícil no mirar cuando nos encontramos algo que creemos puede interesarnos...

Pero sinceramente, con la mano en el corazón, ¿qué hubieras hecho tú? ¿lo hubieras leído, a pesar de estar en tu móvil, si la persona que va a tu lado te pide que por favor lo borres porque no era para ti?

jueves, octubre 19, 2006

No sé...

Ya no sé qué sonrisa inventar. Ni que mirada utilizar.
No sé qué palabras son las que lograrán que el sol bañe esa mirada distante.
¿Y si ya no me quedaran más fuerzas?
Soy una niña desvalida.
Cansada y agotada de esperar.
De esperar ¿el qué?
Una imbécil a la que llaman fuerte, pero débil.
Hoy, mucho.
Con miedo, con penas, con demasiados silencios.
Con pasillos eternos llenos de sombras que se me acercan demasiado.

No me gusta el vacío que de vez en cuando me visita.
No me gusta dar a la nada. Me gusta dar, pero no cuando lo que das se tira por la ventana.
Me gusta recibir sonrisas. Y un poco de dulzura.
Sólo eso.
No estoy en condiciones de pedir. ¿O sí?
¡Qué mala es la indiferencia!
La vida es complicada, sí. Pero a veces, lo es demasiado.
Y estoy agotada (ya lo he dicho) y no sé cómo enfrentarme a ella.

Hay días en los que uno se siente idiota.
Hoy me ha tocado a mí.

miércoles, octubre 18, 2006

Mano


A veces, es eso todo lo que necesito.
Una mano donde agarrarme, que me diga por dónde debo ir y por dónde no.
Que me enseñe el camino.
Que me coja con fuerza, que me guíe.
Que me lo ponga fácil.


Una mano fuerte pero dulce.
Sí, fuerte. Muy fuerte.
Una mano que me diga ven.
Decidida pero no incisiva.

Una mano que me acaricie.
Que escriba en mi piel.
Que baile por ella sin necesidad de melodías.
Que se pierda en mi cuerpo sin querer buscar la casilla de salida.

Una mano dice mucho.
Dos, ni te cuento.




martes, octubre 17, 2006

Respuesta (III)

Soy de las que, además de pensar, siente.

Respuesta (II)

Soy de las que piensa que los miedos no hay que fomentarlos gratuitamente.
Y que no me gusta que me metan el dedo en la llaga.

Respuesta (I)

Soy de las que piensa que, igual que no hay mujeres frígidas sino hombres inexpertos, no hay preguntas malintencionadas sino respuestas desafortunadas.

Pregunta (III)

¿Hasta dónde hay que defender una verdad... frente a las mentiras de los demás?

Pregunta (II)

¿Hasta dónde hay que defender una verdad... cuando la persona que tienes enfrente no quiere escucharla?

Pregunta (I)

¿Hasta dónde hay que defender una verdad?

domingo, octubre 15, 2006

Más cerca

Enamorarse de la persona equivocada.
Reír con quien te hace llorar.
Irse a vivir con la persona a la que quieres pero de la que no estás enamorada.
Creer a quien te miente.
Querer a quien no sabe querer.
Perdonar a quien no dice lo siento.
Soñar con quien no cree en los sueños.
Amar a quien te dice que no eres su prioridad.
Buscar a quien se esconde.
Encontrar lo que no buscas.


La vida es caprichosa.
Supongo...

viernes, octubre 13, 2006

Confianza

"Confío en ti".
Es una de las mejores cosas que me pueden decir, y que más aprecio escuchar.
Llego a casa con los ecos de esas tres mágicas palabras. Algo que me llena de orgullo y felicidad, aunque reconozco que ir a una fiesta y que una persona que sabe quien eres pero con la que nunca has cruzado palabra te reciba con un "Aquí está R., la valiente" es también motivo de subidón.

Y a ti, ¿qué es lo mejor que te pueden decir?

miércoles, octubre 11, 2006

La espera

Sé que tengo que esperar.

Sí, pero... ¿hasta cuándo?

martes, octubre 10, 2006

Ganas

Tengo ganas.
No, tengo muchas ganas.
Tantas que a veces pienso que voy a explotar.
Tantas... que si esto fuera un bolero diría que me falta el aire.

Ganas de que me mires.
De que me toques.
Ganas de hablar sabiéndome escuchada.
Ganas de que me respires, de que me bebas.
Ganas de que compartas mis lágrimas.
De que provoques mis risas.
Ganas de que me muestres.
De que te escondas en mí.

Tengo ganas de gritar.
De callar.
De llorar.
Tengo ganas de vivir.
No sé si de ésta o de otra manera.

Tengo ganas de que me hierva la sangre.
Con miradas.
Con palabras.
Con tus manos dentro.
Y fuera.

Tengo ganas de ser inolvidable.
De dejar de ser luna para convertirme en sol.
Ganas de perderme.
Tengo ganas de encontrar mi lugar.
Olvidar los otros.
Ganas de reinventarte.

Tengo tantas ganas...

lunes, octubre 09, 2006

Bye bye

Hacerles frente. Sin miedo.
Meterlos en cintura. Con mano dura.
Ahuyentarlos. Espantarlos. Alejarlos.
¿Qué tal sodomizarlos?
Poderles. Ganarles la partida.
Hacerles un corte de mangas. Descaradamente.
Reírme en su cara. Sin disimulos.
Sacarlos a bailar. O incluso coquetear con ellos.

... Cualquier cosa excepto dejarme vencer por ellos.


¡Ay, qué poco me gustan mis fantasmas!

domingo, octubre 08, 2006

Entendimiento

En la obra de teatro que vi ayer, "La comedia del bebé", uno de los protagonistas comenta los motivos de su felicidad, asociados a la época que él está viviendo: la siempre bien valorada juventud.

En esa particular lista, el amor y la relación que mantiene con su mujer se llevan los primeros puestos. Curiosa y no sé si paradojicamente, al final de su enumeración, y para definir lo estupendo de su matrimonio, dice: "Ni siquiera nos entendemos el uno a otro".

Una frase que me dejó pensando.
¿Crees que es indispensable el entendimiento de la otra persona en una relación de amor, o por el contrario se puede amar sin llegar a entender del todo a la persona que tenemos enfrente?

viernes, octubre 06, 2006

¡Tengo un spot!

Una de las cosas buenas de esto del blog es hacer amigos.
Personas de las que apenas conoces las referencias que dejan en sus páginas, pero que de alguna manera, están ahí.

Esta mañana, me he encontrado una encantadora sorpresa.
Es de una persona de la que sé que es divertida, algo gamberra, observadora, deportiva y muy inquieta.
Me ha hecho un regalo que quiero compartir con todos vosotros.

Gracias, Stiff

Aquí lo dejo... Por cierto, huele muy bien.

miércoles, octubre 04, 2006

Pelotas. Palabras. Burbujas.

Comenzamos compartiendo unas pelotas. De ida y vuelta. O de más ida que vuelta.
Respirando el aire que te sobraba. Aprovechando la distancia que imponía la pista para poner distancia a lo que no la tiene.

Continuamos compartiendo unas letras. Primero, las mías. Ésas que tanto te gusta corregir. Las que decoras con guirnaldas rojas, porque sabes que el rojo es mi color.
Entonces nos adentramos por un maravilloso camino por el que prefiero ir de la mano. Aunque ahora que lo pienso, lo que prefiero últimamente es ir de la mano... sea cual sea el camino.

Mis palabras sobre las tuyas, o las tuyas al lado de las mías.
"¿Por qué no te atreves más con lo que escribes?"
Quizá es que me falte valor. O tiempo. O ganas.

Mientras, imagino un piano con vida propia, escribo cartas de desamor olvidando que debían ser de amor, me conformo con estos trozos de mí que son los posts de casi adiario, o invento argumentos que tendrán que defender otros.

Luego llegó el turno de atender a tus palabras. Por allí navegamos otras cuantas réplicas. Esta vez, no fue difícil convencerte. Nos entendíamos.

Terminamos compartiendo media docena de burbujas salpicadas por mis sábanas. Cuando menos te lo esperas, descubres que los fuegos artificiales no sólo tienen lugar allá arriba.

Y te sorprendes a ti misma pensando que las pelotas, las letras, y las burbujas no son tan distintas.
¿Quién me lo iba a decir a mí?

lunes, octubre 02, 2006

Verdades y mentiras (las mías)

Es verdad que estoy confusa.
No es verdad que lo tengo todo hecho.
Es verdad que me ilusiono rápido.
No es verdad que sea temeraria.
Es verdad que cada vez me molesta más la mediocridad.
No es verdad que no eres celoso.
Es verdad que me gusta cantar.
No es verdad que me gusta el fútbol.
Es verdad que pienso demasiado.
No es verdad que siento poco.
Es verdad que cada día me gusta más escribir.
No es verdad que no me gusta el chocolate.
Es verdad que no quiero ser fantasma.
No es verdad que me guste esconderme.
Es verdad que estoy sola.
No es verdad que me sienta sola.
Es verdad que me gusta escuchar.
No es verdad que sepa tocar el harpa.
Es verdad que tengo hambre a todas horas.
No es verdad que quiera tirar la toalla.
Es verdad que a veces me rompo.
No es verdad que no luche.
Es verdad que voy subida en una noria.
No es verdad que no hago preguntas.


... Son verdades lo que aquí escribo.
No es verdad que no me salen del alma.

domingo, octubre 01, 2006

Una semana

Ha sido una semana intensa.
La he vivido muy intensamente.
Me ha gustado. Por muchos motivos.
El tema que más me ha quitado el sueño lo he resuelto con mucha dignidad.
Estoy satisfecha con el trabajo bien hecho, con el trabajo en equipo. Orgullosa de que confíen en mí, recordándome sin decirme lo mucho que me gusta mi trabajo.
Sonrisas y enhorabuenas de viernes por la noche.

Al día siguiente me sorprendieron con otra excursión.
No sabía que el cielo me tenía preparado este regalo.




Ya he dicho en alguna otra ocasión que me vuelven loca los cielos nublados. Con fuerza, arrogantes, con personalidad. La intensidad otra vez.
Nubes que me persiguen y que me recuerdan que siempre hay un sol escondido detrás de ellas.

A menudo pienso que las nubes son para compartirlas. Y eso es lo que hoy pretendo. Compartir algunas gotas de lo que a mí me gusta, de lo que me hace respirar hondo, de lo que soy...

Y sí, esta semana he sido feliz. Como somos felices las personas. A ratos.

miércoles, septiembre 27, 2006

Elegir

¿Por qué elegir implica renunciar?


martes, septiembre 26, 2006

El mismo cepillo de ayer

Llego a casa agotada y con ganas de pocas fiestas.
Entro en el baño, con intención de ignorar al arrogante de las cedras que me mira desde la estantería de la derecha.

No me permite que lo ignore, ha vuelto a hacer de las suyas.

¡¡Se ha liado con el peine de púas anchas!! Ese que desenreda como ningún otro mis rizos. El que no le presto a nadie, que yo soy muy mía.

Supongo que la cuestión es dar la nota. Llamar la atención. ¿Qué digo? Llamar mi atención.
Los miro de un reojo que no es tal. Ahí están. Revueltos el uno con el otro, dejándose llevar por el desenfreno, la lujuria, la pasión. Supongo que lo de la compenetración entre un cepillo de dientes y un peine de púas anchas debe ser cuestión de suerte.

Podría decir algo tan manido como ¡Y yo con estos pelos! Pero no, prefiero autoconvencerme con un ¿Ves como estaba mejor encerrado bajo llave?

lunes, septiembre 25, 2006

En el baño

Hay que ver lo que da de sí un utensilio tan aparentemente inofensivo como un cepillo de dientes.

Sí, sí. No se me ha ido la pelota (aunque lo parezca).
Quizá es que no os habéis parado a pensarlo, pero un cepillo de dientes (sobre todo, cuando no es el tuyo) da mucho que pensar. Auténticos quebraderos de cabeza, diría yo.
Horas interminables de charleta ante el espejo.
Minutos de dudas, ratos de qué hago contigo.

Anoche me hubiera gustado que ese cepillo de dientes que me miraba arrogante desde su lugar de reposo habitual, hubiera tenido vida propia. Y de paso, dejarme hacer...

Ay que sí, que estoy loca.
Si estuviera enamorada podría terminar este post de la mejor manera.
Por ti.


sábado, septiembre 23, 2006

Llamadas

Sonó el teléfono. Eran las 2 de la mañana. Una hora a la que sólo te llaman cuando hay algo importante que decir.

No pensé ni en la guardia civil, ni en la agencia tributaria, ni en ningún hospital, ni en mis acreedores... ni mucho menos en Securitas Direct, a quienes ni temo ni respeto.
No entré en el baño ni cerré ninguna puerta. Así, a pecho descubierto, me limité a escuchar.


- Te quiero.

- ¿Y te has dado cuenta ahora, en medio del sueño? (Cogiendo carrerilla) Porque tú serás de los que cuando dicen Te Quiero significa Te Quiero, ¿verdad?

- Hombre, no pensarás que es que me han entrado ganas de decirle Te Quiero al aire... Es a ti a quien quiero.

- Quizá fueras de esos que se acostumbró a dormir diciéndole Te Quiero a la mujer que tenía al lado...

- A lo que me acostumbré fue a quererte a ti.

- Bueno, entonces dímelo una vez más y me volveré a dormir.

- Te Quiero. Felices Sueños.

jueves, septiembre 21, 2006

Nunca deberían serlo

"Cuando las mentiras no son imprescindibles, la vida es un logro".


Encontrado en el último Premio Planeta, "Pasiones Romanas", de María de la Pau Janer.

martes, septiembre 19, 2006

Caer

Se caen las hojas.
Los niños cuando aprenden a andar.
Se caen incluso los aviones.
Cae la noche.
Las malditas copas cuando la bandeja está muy llena.
Se caen los que tienen el valor de subirse a motos que van a más de 300 kilómetros/hora.
Cae la bolsa.
Se cae el torero ante la cara del toro.
Caen los imperios. Los pequeños, pero también los grandes.
Se caen los dientes.
También las tetas. Sí, se acaban cayendo.

Todo vale.
Todo, menos que me caiga yo.

lunes, septiembre 18, 2006

Boutique especial

Se busca una idea.
Se intercambia una ilusión.
Te compro tu sonrisa.
Te vendo mis fantasías.

Te cambio lo que más quieres por lo que más me gusta.
Dame tres gotas de amor y llévate dos raciones de pasión.

Bienvenido al todo incluido de mí misma.
Bienvenida a la sección de compra-venta de un poquito de ti.

La boutique de hoy soy esto.
Sin rebajas, ni saldos, ni chollos al por mayor.

Pero hoy estoy generosa: te regalo un trozo de mi corazón.

Y tú, ¿qué me vendes?

domingo, septiembre 17, 2006

Anónimo

Me encantan los anónimos. Me muero de curiosidad por saber quién se esconde tras la mágica palabra de anonimous, pero reconozco que me chiflan.

Está claro que en este mundo de los blogs, todos somos anónimos. Escondidos tras un pseudónimo y con una página a la que nos asomamos de vez en cuando. Con matices que llegamos a entrever entre lectura y lectura, pero anónimos al fin y al cabo.

¿Hay diferencias entre los comentarios que yo te dejo a ti si firmo como anónimo o por el contrario, elijo la palabra lunarroja? ¿Te atreves algo más si dejas tus comments con un simple anónimo?

Fascinante mundo este... ¿Exhibicionismo de uno mismo? El otro día me lo preguntaba un amigo recién incorporado al mundo del blog. Difícil respuesta.

Está claro que hay personas que se sienten más cómodas escribiendo en su blog para auténticos desconocidos (quizá yo estoy más cerca de este grupo. Apenas conocen esta página cuatro o cinco personas conocidas; y me consta que no todas lo leen); aunque también se dan casos de autores que mantienen su blog casi exclusivamente para sus amigos o personas cercanas.

Me gustan los anónimos, ya lo he dicho. Todos: los fáciles, los provocadores, los originales, los que no están de acuerdo, los que sí, los que se curran los comentarios, los que escriben sin pensar e incluso los que piensan lo que escriben.

Mi gratitud al anónimo (sea quien sea) que ayer dejó el siguiente comentario en mi post anterior. Sólo decirte que me dejaste sin palabras. Por eso hoy publico las tuyas. Gracias.


Y soñé con ella
divina, radiante, bella
pude tocarla y besarla
en verdad linda como una estrella

su pelo rubio y sedoso
parecía la noche en mis
manos
y su cuerpo una escultura
hecha por el mejor artesano

su rostro como el de una
diosa
era terso y bello
se me figuraba tener en mis
brazos
al más bello angel del cielo

y qué decir de sus ojos, boca
y demás encantos
tenía un...no se qué, y me
estaba embrujando
tanto que llegue a pensar
que en el mismo sueño estaba
soñando

quizás el mejor sueño
que jamás hubiera tenido
pues llegué a sentirme
impropio
de que estuviera conmigo

pero sé que no fue así
de eso estoy seguro
porque con su sonrisa y
mirada
de mi tristeza rompió los
muros

y en el momento más feliz
de mi sueño extasiado
volví mi cabeza para verla
y se había marchado

yo estaba preparado
presentía que se iría
porque aunque fuera un
sueño yo sabía
que en mi vida real no existe
la alegría

al despertar latía mi pecho
estaba solo y desorientado
ya que nunca había sentido
esto...
creo que estoy enamorado.

viernes, septiembre 15, 2006

Por la mañana

Son bonitas.
Nos hacen soñar.
Desde abajo, y también desde arriba.

Esta mañana me la he encontrado con forma de regalo.
No sólo me gustan a mí.

Quizá prefiero el pasillo porque me he acostumbrado a ceder la ventanilla a mis compañeros para que disfrutaran ellos.
Porque en su sonrisa estaba la mía.
Porque encontré felicidad en felicidades ajenas.
Porque no me importa renunciar, cuando la renuncia es para aumentar.
"Estamos para sumar, nunca para restar".

Yo no soy de pasar lista.
Y no me gusta que nadie pase lista para ver si están y sobre todo quién está.
Yo sé que está quien tiene que estar.

Yo estoy... hoy paseando por las nubes.



(Gracias A. No sólo por tus nubes).

martes, septiembre 12, 2006

Hoja en blanco

Una hoja en blanco y empezar... ¿Cómo empiezo hoy, cuando hay tanto que decir, tanto que callar?
Suena de fondo Bebe diciéndome que hoy voy a descubrir que el mundo es sólo para mí y que nadie puede hacerme daño. Fíjate si estoy contenta que hasta me lo creo.
Suenan en mi recuerdo algunos noes. Demasiados. Y otros síes como soles. Algún bolero con sabor a melocotón y un par de canciones a punto de nacer que no sé si veré morir.
Suena también el echarme de menos a la altura de la ingle.
Suenan teorías de círculos y espirales bien compartidas cuando menos te lo esperas.

Podría hacer un boquete entre la cabeza y el corazón para que hablaran de una vez y se dejaran de tonterías. Que me tienen frita. O disociarse para siempre de una vez. Debería llamar a mi abogado para preguntarle qué me cobra por el divorcio entre mi cabeza y mi corazón. Y sobre todo, por saber si va a ser tan expres como dicen en el telediario, que tengo entendido que luego no es tan expres como debe ser en este caso.
Un divorcio, ¡lo que me faltaba!

Lo pienso, mejor me quedo como estoy. No vaya a ser que al final la cabeza pida la custodia de mis ojos y no pueda volver a mirarte.

lunes, septiembre 11, 2006

Buscando...

"Los hombres damos amor buscando sexo y las mujeres dais sexo buscando amor".

Me lo acaba de contar un amigo y me ha dejado pensativa.

¿Estás de acuerdo?

sábado, septiembre 09, 2006

Un cuento

........................... LA SUMISIÓN

La mujer que ahora está tomando un helado de vainilla en la primera mesa de este café lo ha tenido siempre muy claro. Busca (y buscará hasta que lo encuentre) lo que ella llama un hombre de verdad, que esté por la labor, que no pierda el tiempo en detalles galantes, en gentilezas inútiles. Quiere un hombre que no preste atención a lo que ella pueda contarle, pongamos, en la mesa, mientras comen. No soporta a los hombres que intentan hacerse los comprensivos y, con cara de angelitos, le dicen que quieren compartir los problemas de ella. Quiere un hombre que no se preocupe por los sentimientos que ella pueda tener. Desde púber huyó de los pipiolos que se pasan el día hablándole de amor. ¡De amor! Quiere un hombre que nunca hable de amor, que no le diga nunca que la quiere. Le resulta ridículo, un hombre con los ojos enamorados y diciéndole: "Te quiero". Ya se lo dirá ella (y se lo dirá a menudo, porque lo querrá de veras), y cuando se lo haya dicho recibirá complacida la mirada de compasión que él le dirigirá. Ésa es la clase de hombre que quiere. Un hombre que en la cama la use como le apetezca, sin preocuparse por lo que le apetezca a ella, porque el placer de ella será el que él obtenga. Nada la saca más de quicio que uno de esos hombres que, en un momento u otro de la cópula, se interesan por si ha llegado o no al orgasmo. Eso sí: tiene que ser un hombre inteligente, que tenga éxito y con una vida propia e intensa. Que no esté pendiente de ella. Que viaje, y que (no hace falta que lo haga muy a a escondidas) tenga otras mujeres además de ella. A ella no le importa, porque ese hombre sabrá que, con una simple silbido, siempre la tendrá a sus pies para lo que quiera mandar. Porque quiere que la mande. Quiere un hombre que la meta en cintura, que la domine. Que (cuando le dé la gana) la manosee sin miramientos delante de todo el mundo. Y que, si por esas cosas de la vida ella tiene un acceso de pudor, le estampe una bofetada sin pensar si los están mirando o no. Quiere que también le pegue en casa, en parte porque le gusta (disfruta como una loca cuando le pegan) y en parte porque está convencida de que con toda esta oferta no podrá prescindir jamá de ella.

............................. QUIM MONZÓ (Ochenta y seis cuentos)



viernes, septiembre 08, 2006

Olímpica

Estoy agotada. Llevo una semana entrenando duro.
Le he dicho a mi entrenador que se relaje. Que no pretendo ser olímpica. Ni mucho menos.
Aunque para mis adentros, y a pesar de que la competencia es dura, después de estos días de rendimiento a tope tengo claro que podría hacerme con la plata. Incluso con el oro.


CATEGORÍA: Salto de obstáculos.

jueves, septiembre 07, 2006

Dudas

Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.
No.
Sí.


... ¿O es que tú siempre lo has tenido claro?

martes, septiembre 05, 2006

Brillos

En un comentario del post anterior, 33+2 dice que le encanta la primera frase. "Cuando menos te lo esperas, surgen brillos".

Lo escribí hace unas horas. Ahora debería empezar éste con un "Cuando menos te lo esperas, el cielo se nubla y no vuelves a ver el sol".

Hoy ha sido así: un día de luces y sombras. De sol y brillos; y de nubarrones que amenazan tormenta.

Creo que mi blog es sincero. Aquí habitualmente paseo desnuda, ando en zapatillas y escribo lo que en cada momento siento. Pero hay de un tema del que casi nunca hablo.
Hoy gran parte de las nubes han venido de ahí.

La persona que un día descubrió de muy mala manera este blog y que me obligó a cambiar el nombre (hace ahora un año aproximadamente) no soporta que la gente me valore.
Puede levantarse revenida y entonces darte el día. Ommmmm, me encomiendo a los dioses. Es cuestión de paciencia.
Siempre he creído que los complejos de inferioridad y los celos (también los profesionales) son requisitos que sólo le corresponden a los mediocres.

Pero la cosa, amigo mío, es mucho más fácil.
Sí, me quieren a mí. No te sorprendas. Porque lo hago bien. Para algunos, incluso muy bien. Me temo que lo sabes. Porque me implico, me apasiono, y lo disfruto. Y por muchas otras cosas más.
Y a ti, eso te debería venir más bien que mal. Deberías utilizarlo a tu favor y nunca en mi contra.


Habían sido suficientes nubes.
Eso creía. Porque el cielo me tenía reservada otras de propina. Éstas también descargaron fuerte.
Con forma de incomprensión, de frases equivocadas en su dirección, de frialdad, de mantener loqueyodigo porque yolodigo.


Me ha costado mucho escribir este post.
Creo que nunca he tardado tanto tiempo en más de un año.
No estará bien escrito ni pienso revisarlo. No hay fuerzas.
Pero no quiero dejar las zapatillas ni vestirme a toda prisa porque me miren por donde no deben.
Tengo miedo, pero lo aparto y lo dejo en una esquina hasta que me atreva a darle a "Publicar entrada".
Aquí escribo simplemente lo que me da la gana, cuando me da la gana.
No voy a disimularlo: estoy triste. Mucho.


Y efectivamente, cuando menos te lo esperas los brillos se van a tomar por culo.

Vitamina

Cuando menos te lo esperas, surgen brillos.

Y siempre hay personas que logran que sonrías.
Aunque no estén muy cerca de ti.
Aunque desconozcan la importancia de sus palabras.

Siempre es bueno que te valoren.
La mejor vitamina en una mañana que otros se empeñan en convertir en gris.
Y no me viene mal, ahora que se me han terminado esas pastillitas de hierro que tomaba cada mañana en el desayuno...

sábado, septiembre 02, 2006

Amigas

Somos amigas desde hace muchos años.
Desde que la conocí, sabía que nos llevaríamos bien. No hace falta saber mucho de quien tienes enfrente para darte cuenta enseguida de que hay complicidades por medio.

Viene a mi casa a menudo. Hay rachas en que tiene otros planes y no aparece. Ni me llama. Yo la entiendo, y por eso no la pregunto demasiado. Cuando viene para instalarse una temporada larga, reconozco que llega a agobiame. Y hay días en los que, sinceramente, no la soporto.

Últimamente no quiero cruzarme con ella. Trato de evitarla. Sí, la evito. No quiero que me mire a los ojos y me pregunte qué me pasa o cómo estoy. Las cosas, las personas, las situaciones cambian.

Y aunque seguimos siendo amigas, hoy no quiero cenar contigo, maldita soledad.

jueves, agosto 31, 2006

Preguntas de difícil respuesta

Hace unos días quedé a comer con unos amigos. La hija de uno de ellos, de siete años, me dijo con toda la naturalidad del mundo que por qué no me convertía en la novia de su padre. Le pregunté por qué y ella me dio sus motivos, que me llegaron al corazón (que por tan personales no voy a exponer aquí, no sea que me denuncie el defensor del menor).

Los mundos y las mentalidades de los más pequeños son un viaje a la fantasía, a la simpleza y evidencia más inteligentes, a un sentido común evidente pero certero, al descaro aceptado de quien se sabe inocente.

Para salir del paso le contesté rápidamente que no, que eso no podía ser porque su padre no quería tener novia. Ella contestó que eso no era así, que su papi le había dicho lo contrario. Llamada por la frivolidad y buscando una respuesta que no dejara abierta ninguna posibilidad, le añadí que además, mi próximo novio debía ser rico. Pensé que el tema quedaría zanjado. Ella inventó entonces enormes riquezas, divertidísimas y muy originales.
Se me acababan las posibilidades.
Miré para otro lado.

Entonces ella, dándome una tregua, inició otra pregunta. Se acabó la tregua: me dijo que por qué no me gustaban los niños. Yo, asombrada, le pregunté que por qué me decía eso. "Porque nunca has tenido hijos", me respondió como si nada. Intenté convencerla de que eso no tenía nada que ver con mis gustos, que eran circunstancias de mi vida, pero que pensaba tenerlos algún día... Parece que se quedó tranquila. Pensaba en su objetivo, tener un hermano bebé cuanto antes.

La cosa paró ahí. Nada que ver con la pregunta que me ha hecho hace un par de días mi sobrino de 6 años. "Tía, ¿qué es un eyaculador precoz?"

martes, agosto 29, 2006

Insomnio

Anoche tuve un ataque de insomnio, algo que no es frecuente.

De repente, allí estaba todo.
Entre mis sábanas se mezclaban la lágrima viajera nacida un par de horas antes, la crueldad en algunas respuestas que no merezco, la elección desafortunada de un teléfono sin batería, la sonrisa sincera de siete años, la falta de comunicación en mi despacho, las llamadas que no cesan, la falta de vacaciones largas que me hayan permitido desconectar, las frases inacabadas, un cansancio que no es físico…
Subida a mi almohada me sonreía esa intención descarada de ignorarme, de no dar oportunidad siquiera a la insinuación. De hacer inexistente todo lo bueno que hay.

¡Qué malo es el insomnio… pero que de verdades encierra!

lunes, agosto 28, 2006

Viajera lágrima

El otro día soñé que era lágrima.
Salía de tus ojos, paseaba por tu rostro, moría en tu boca.

Me gustó navegar por la geografía de tu cara.
Llegar hasta esos rincones que conozco tan bien,
mojar tus pestañas, tus mejillas.
Sentir la humedad de tu lengua,
que me atrapaba para no dejarme escapar.

Pero sin que te dieras cuenta seguí mi camino...
Recorrí tu cuello como quien flota en un plácido mar.
Me encontré en tu pecho convirtiendo tus venas en barrotes que me encarcelaran para no escapar jamás.
Me resbalé por tus muñecas, dibujándote nuevas líneas que no pudieras borrar.
Salté a los muslos, abriéndome el camino que de sobra conocía pero que no dejaba de impacientarme.
Surqué las rodillas, viajé hasta tus tobillos, y casi al final de tu cuerpo me di cuenta que era imposible volver atrás.

Que llegar hasta ahí había sido un viaje largo pero maravilloso; pero que una lágrima, al fin y al cabo, es algo efímero, etéreo, insignificante, caduco.
Pero verdadero.

viernes, agosto 25, 2006

Terapia

El otro día hablaba con D. sobre la facultad terapéutica que tienen los blogs.
También he leído recientemente que escribir un blog sustituye en muchos casos la visita al psicólogo. Es mucho más barato y para mi gusto, mucho más divertido.

Yo no hago uso del segundo. Bastante del primero. Y si fuera efectivamente una terapia, o si tuviera que sentarme en el diván, hoy sería esto:

Últimamente siento que falto de muchos sitios:
De aquella terraza un par de noches.
De ese cumpleaños que no fue diseñado para mí.
De varios paseos por Madrid,
Esta misma noche, en el norte.

Últimamente siento que me callo muchas cosas.
Pero que también digo más.

Últimamente estoy contenta.
A ratos.

Ahora te toca a ti hacer de psicólogo.
Y dejar aquí tu diagnóstico.

jueves, agosto 24, 2006

Adivina adivinanza

Es deseo.
Es impaciencia.
Es nervios.

Es fuego.
Es compartir.
Es risa.
Es fuerza.

Es seguridad.
Es gustito.
Es música.
Es sol.
Es pasión.

Es mirada.
Es plenitud.
Es dar.
Es felicidad.
Es creación.
Es brillo.

No es eterno.
¿Qué es?

miércoles, agosto 23, 2006

Animal de de cinco letras: BURRO

Una mujer va en coche por la carretera.

Un hombre va conduciendo por la carretera pero en sentido contrario.

Cuando se cruzan, la mujer baja la ventanilla y le grita: ¡¡BURRO!!

El hombre inmediatamente le responde: ¡¡PUTA!!

Ambos continúan su camino, el hombre especialmente satisfecho de su agilidad en la réplica. Pero en la primera curva de la carretera...


Moraleja:

Los hombres nunca entienden lo que las mujeres quieren decir.

lunes, agosto 21, 2006

Hombres: Manual de uso y disfrute

En mi último post, frivolizaba escasamente sobre algunas actitudes de los hombres, de sobra conocidas por todas las lectoras de este blog y mucho me temo que también por los lectores (genero masculino).

Lo de provocar siempre me ha gustado, y más sobre ciertos tópicos. Pero casualidad ha sido elegir el libro que me acompañaría esta tarde en la piscina. Recién terminado "Brooklyn Follies" de Paul Auster, y esperándome en la mesilla de noche "La vida sexual de Catherine M." de Catherine Millet, me apetecía algo fácil, de transición, que me pudiera terminar en apenas un par de horas. He echado mano de la librería y me ha hecho gracia el título de ese típico libro que nunca sabes cómo ha llegado hasta ahí: "Hombres. Manual de uso y disfrute", de una tal Stephanie Brush.

Reproduzco literalmente el texto que viene en la contraportada:

"Usted es una mujer inteligente, atractiva, sofisticada y brillante. Tiene una espléndida carrera profesional por delante, un cómodo apartamento, una cautivadora figura y, seguramente, despierta la envidia de todos sus conocidos. Usted no necesita un hombre.

Pero si, a pesar de todo, quiere gozar de su compañía, sus gracias, sus saltitos y sus caricias, este libro puede serle muy útil. Le enseñará cómo elegir al hombre que mejor se adapta a sus necesidades, cómo acostumbrarlo a su excitante ritmo de vida o cómo domarlo para que haga las delicias de sus amigos en las reuniones sociales.

Aprenda a disfrutar de los hombres, úselos sin miedo. Después de todo, ellos se lo agradecerán".

Después de eso, podéis imaginar el contenido de sus más de doscientas páginas. Sin comentarios. Y palabrita que esta vez no ha sido para provocar.

viernes, agosto 18, 2006

Hombres

Algunas dudas que tengo en torno a los hombres:

¿Por qué a la mayoría, a determinada edad, le entra una alergia violentísima a la palabra novia?

¿Por qué, a pesar de esa violentísima alergia, la mayoría de la mayoría acaba casándose con ellas?

¿Por qué no hacen lo que dicen y no dicen lo que hacen?

¿Por qué los que dicen lo que hacen se lo cuentan primero a sus amigos?

¿Por qué siempre colocan el tubo de la pasta de dientes al contrario de como lo pones tú?

¿Por qué piensan que los pasos de cebra se inventron para mirarle el culo a las viandantes?

¿Por qué sí es no, no es depende, y no sé es por supuesto?

¿Por qué nunca piensan nada cuando les preguntas en qué piensan?


Ay, ay, ay... Hombres... ¡benditos!

miércoles, agosto 16, 2006

Nostalgia

Empieza a refrescar. Y llega. La nostalgia.
Mira que no me gusta el calor, te lo tengo dicho.
Pero todos los años me pasa. Cuando llegan estas noches en las que cierro las ventanas, sé que tengo que hacerle un hueco en mi sillón. Que se quedará conmigo unos días. Y que lo mejor que puedo hacer es darle un poco de conversación.

- ¿Cómo te fue?
- No me fue mal.
- Vuelta a la normalidad.
- No me lo recuerdes, por favor. Que mañana empiezo otra vez a trabajar.
- Atrás dejas bonitos recuerdos.
- No los dejo atrás, más bien van a mi lado.
- Pero ¿y esa bonita cena al borde del mar? Ya sólo puedes recordarla.
- Con saber que lo he vivido me basta.
- Y esa conversación en torno a una vela... ya no volverá.
- Volverán otras muchas.
- Pero la luna ya no será esa luna. Y el sol ya no será ese sol.
- Quizá para entonces yo ya no sea la misma.
- Me tenéis sobrevalorada. Te digo que no sirvo para mucho. Deberías saberlo ya.


Nostalgia, en noches como hoy, te hago un hueco en mi casa.
Estamos entre amigas.

martes, agosto 15, 2006

Conquistada

"La primera y mejor de las victorias es la conquista de uno mismo"


........................................... Platón

sábado, agosto 12, 2006

Respuestas

Por mucho que preguntara, las respuestas no estaban ni en el mar



Ni en el sol




Ni en la arena




Ni en el ocaso



Las respuestas las tengo yo.
Ahora sólo me falta encontrarlas.

viernes, agosto 04, 2006

Me voy

... a buscar felicidades en el azul mediterráneo.
Donde el azul mediterráneo es más azul y más Mediterráneo.
A disfrutar conmigo y de mí misma.
A encontrar una ilusión. O las que el camino quiera regalarme.
Es un paréntesis. Muy breve. Escaso.
Pero merecido.

Me voy al encuentro de esa paz que ahora necesito.
Después de un año de montaña rusa, hoy quiero más un tío vivo.
Calma, sí.
Me reseteo.
No sé si en ese trance perderé información de mi disco duro.
Ojalá la perdiera.
Ojalá se quedara por el camino todo lo que aún me duele.
Ojalá el mar pudiera ahogar y enterrar para siempre ese maldito, insípido y estúpido personaje que convierte mi estómago en un nudo y me sumerge en un mundo tan feo y tan oscuro que me da miedo, pero sobre todo asco, sólo recordarlo.
Ojalá el sol derritiera su pavor al nosémuybienqué para que la luna dejara de ser una sombra casi inexistente. Porque la luna no quiere dejar de brillar, pero sobre todo, porque es imposible ocultar a la luna.


"¿Dónde has encontrado esa calma que te sienta tan bien?"
No sé si reír o llorar.
Aunque la vida es demasiado corta y demasiado bonita para llorarla más que reírla.
Yo misma sé que no la he encontrado en ningún mercadillo de gangas al por mayor.
Ni tan siquiera en un gran almacén donde se liquidan las últimas prendas de temporada.
Que es genuina, auténtica. Mía.


Me voy a mirar a ningún sitio.
A pararme de mí misma.
A ser lo que me de la gana.
A reír, a soñar, a disfrutar.
A navegar sobre las olas y sobre tus brazos.
A aparcar mis miedos y mis soledades por unos días. Muy pocos.
A dejar de pensar en ti para disfrutar de ti.

Me voy con la cara dolida por un par de hostias recientes.
Con la cabeza muy alta por ser yo.
Con el corazón radiante por esuchar tantos tequieros de tantas personas que me quieren.
Con la vida saliendo por cada poro de mi piel que me dice adelante.
Con esa brisa que ya respiro que huele a sal.
Con calma, sí.

Me voy.
Por unos días.
Muy pocos.

miércoles, agosto 02, 2006

Guardado

Era por la mañana. Primavera en Madrid. El sol ya lucía con fuerza y calentaba lo justo. Ni mucho ni poco, como a ella le gusta.
Acababa de tener una conversación telefónica deliciosa. Nada pringosa. Lo justo. Ni demasiado corta ni demasiado larga, como a ella le gusta.

Se subió en un ascensor. Coincidió con su mejor compañero. El más cómplice. Palabras intercambiadas a golpe de yomebajoenlacuarta,¿y tú?
Antes de que se abrieran las puertas, sonó un mensaje en su móvil. Justo al salir, ella le dió a Leer Mensaje.

"Se me ha olvidado decirte que te quiero".

Tiene ese mensaje guardado en su móvil y ese momento retenido en su cuerpo.

lunes, julio 31, 2006

De nuevo pregunto...

Casi nunca releo lo que escribo.
Nunca guardo lo que escribo. Quizá sea porque sé que no merece la pena.
No conservo prácticamente nada de lo escrito por mí. No ocurre lo mismo con lo escrito por los demás.

Pero esta mañana, no sé si llevada por la nostalgia, he querido releer lo escrito aquí hace exactamente un año. Quería respirar cómo era yo hace doce meses, cómo estaba, cómo me sentía. Y es lo bueno que tiene el blog, que no hace falta guardarlo porque ahí queda. Basta con doble click al mes que quieras y... sorpresa.

Rara la sensación de reencontrarnos con una misma en tiempos pasados. Cercanos y lejanos al mismo tiempo. Muy cerca, muy lejos. Tan cerca y tan lejos al mismo tiempo.

En aquel mes de julio de 2005 me hacía una pregunta que ahora quiero repetiros: ¿Se echa de menos a quien se quiere o se quiere a quien se echa de menos?

Por aquel entonces, este blog estaba naciendo así que encontré pocas respuestas. Ahora os busco y provoco vuestras palabras. Sí, quiero respuestas. Sí, llevo un tiempo en que quiero que me digan. Lo que sea, pero que me digan...

viernes, julio 28, 2006

No es fácil

¿Por qué no me gustarán las cosas fáciles?

¿Por qué me enfrento siempre a lo difícil?

¿Por qué disfruto al superar la dificultad?


Pero sobre todo..., ¿por qué no me encuentro más a menudo con lo fácil para así olvidarme de lo difícil?

miércoles, julio 26, 2006

Viagra

Llevo unos días recibiendo una cantidad asombrosa, y hasta desaconsejable, de mensajitos que me recomiendan a toda costa que me compre la dichosa y milagrosa viagra.

¿Alguien sabe por qué?

lunes, julio 24, 2006

24 de Julio



Bienvenida al mundo, pequeña.
Una vida por delante que hoy has querido estrenar.

Aunque contigo siento que hoy también nazco yo.
En detrimento de esa que ha dejado ganar la batalla a los miedos y las inseguridades en los últimos días. Para volver a la de siempre, la que nunca debí dejar de ser. La que mira de frente y se emociona, la que disfruta con poco o con nada, todo depende, la que le dice a la luna vístete hoy más guapa que nunca, la que goza intensamente aunque no siempre sepa transmitirlo, la que sigue esperando una copla que dice ojos verdes y un bolero que traspase mis sentidos. La tenaz, que no pesada, la que juega a las provocaciones, la que se ríe, canta, baila, con descaro, sin descaro.
La misma que fue todo eso y más durante los meses más bonitos de su vida.

Larga y feliz vida, Laura.
En ti me miro hoy.
En ti nazco también yo.

domingo, julio 23, 2006

Objetos cotidianos

Hay ocasiones en las que los objetos más cotidianos se transforman en elementos que requieren toda nuestra atención.

... Las cosas no siempre son lo que parecen.
Ni como queremos que sean.


martes, julio 18, 2006

Ganar

No sé si es mejor dar o recibir,
amar o ser amado,
hablar o callar.

Lo único que sé es que nunca es mejor restar.
Lo único que sé es que no quiero perder.
Que no quiero perderte.

domingo, julio 16, 2006

YO

34 años. Dos tetas que no siempre tiran más que dos carretas. Algún fantasma en el armario. Los peores, en el alma. Arruguitas que asoman en mis ojos verdes que te quiero verde. Kilómetros por el mundo. Miedos, pocos. Incertidumbres, muchas. Heridas que cicatrizaron a base de lágrimas, de tiempo que todo lo cura y de besos. Preguntas por hacer. Un camino en busca de la felicidad. Palabras de las que no se lleva el viento. Orgasmos inolvidables. Otros inventados. Alguno, insípido. Intensidad siempre. En todo, para bien y para mal. En carne viva. Paciencia hasta el límite envuelta en impaciencia efímera. Distancia para ocultar timidez, que no vergüenza. Mejor, la distancia corta. Ahí soy la reina. ¿Reina? Destronada, digo. Amiga, amante, novia, querida, mal querida, deseada. Mujer de 34 años que aún se pregunta cuándo, dónde, quién, por qué.

sábado, julio 15, 2006

Un día...

El día es mejor queriéndote.

Pero sobre todo, es mejor queriéndome.

miércoles, julio 12, 2006

... Y de más

Ganas...





Ganas...




Ganas...




Ganas...

Y tú... ¿de qué tienes ganas?

martes, julio 11, 2006

Viejos tiempos

Hace tiempo, mucho tiempo ya, alguien me escribió esto:

"A veces pienso que me gustaría conocer las palabras que desactivan tus precauciones; la frase que secuestra tu voluntad. ¿Qué verbo hace que se eche a dormir el vigilante jurado con gorra de plato y porra que hace que te comportes como una chica decente?. A veces me gustaría encontrar los adjetivos que reverberarán en tus oídos mientras coges el autobús y te humedecerán la boca de sonrisas y se te irán los ojos buscando o inventando, que es lo mismo, por las calles de Madrid."

Me pareció tan bonito que lo guardé con mucho cariño. Hoy, de casualidad, me he encontrado con ello. Lo he releído. Y he sentido nostalgia.
No sé si el tiempo acaba con todo, pero a veces estoy más cerca de pensar que sí.

¡Por los viejos tiempos, brindo!

lunes, julio 10, 2006

Palabras

Recuerdo que un día me dijiste que era capaz de utilizar las palabras como el cirujano el bisturí.
También recuerdo otras muchas otras voces al decirme que soy capaz de acercar con la palabra. Atraer hacia mí.

Lo quiero todo, sí. ¿Eso es malo?
Quizá sea peor no querer dar nada.
O no ser capaz de recibir.

Me llama la enfermera.
Estoy a punto de abrir a mi paciente.
A diseccionarlo vivo.
A base de palabras.
De las que no se lleva el viento.
De las que suenan mejor cuando se dicen en voz baja.
Al oído.
Como a ti te gusta.

viernes, julio 07, 2006

Releer

Hoy me he encontrado en mi correo electrónico este maravilloso mail:

No se si te lo he comentado alguna vez, pero de todas las cosas que he leído en este mundo de los blogs, la única que he copiado y releo una y otra vez es tu maravilloso menú del día , recuerdas :

1º Plato:

Cóctel de esperanza.
Revuelto de pasión.
Sopa ilusionante.

2º Plato:

Ternura rebozada.
Besos en su jugo.
Caricias a la plancha.

Postre:

Pirámide de imaginación y toppings de fantasía.
Flan de sonrisas.
Revolcones flambeados.


Si algún día estás de bajón, piensa que sólo una persona con un talento y una sensibilidad especial podría escribir algo tan sexy pero a la vez tan bonito ...


A quien ha conseguido hoy levantarme una moral que estaba un poco por los suelos, gracias.

jueves, julio 06, 2006

Comienzo

Hoy comienza el resto de mi vida.

Me he dado cuenta hace tres minutos.

Pues eso.

miércoles, julio 05, 2006

Demasiado

Demasiado dura.
Demasiado larga.
Demasiado inolvidable.
Demasiado intensa.


........................... La jornada de hoy.

lunes, julio 03, 2006

¡Qué punto!

El carné por puntos.
Punto y aparte.
Deme dos puntos que me he cortado.
Me faltó un punto para conseguirlo.
¡Te has cogido un buen puntito!
Punto y seguido.
Tu abuela se pasa el día haciendo punto.
Cada cual tiene su punto de vista.
Tú siempre poniendo los puntos sobre las íes.
Te encanta estar en el punto de mira.

Por cierto... ¿alguien ha encontrado el Punto G?

domingo, julio 02, 2006

Tú, que aplacas mis soledades.
Que me alejas y me acercas como vienen y van las olas del mar.
Tú, que me reinventas cada día.
Que llenaste de líneas azules mis sueños.

Tú, etéreo, intangible, extraño,
que seduces mi mirada con descaro.
Sin descaro.
Que alimentas mi sonrisa,
y la transformas en deseo.
Húmedo.

Tú, fuerte, solitario, indómito.
Fantasma de ti mismo.
Tesoro en mí misma.
Que revuelves el huracán de mis sentidos.
Dulces.
Ásperos.

Tú, que me pierdes sin intenciones,
me encuentras sin buscarme
me olvidas sin castigo
me llamas sin nombrarme.

Tú.
Hoy, tú.

Mi color


¿Por qué?

................. Porque yo lo valgo.

Y porque hasta para ser un personaje de cuento hay que tener clase.

miércoles, junio 28, 2006

Residuos

El otro día, tomando unas cervezas con un amigo, surgió el tema:

- "Y si el amor sólo fuera lo de los tres primeros meses".

- "¿Y que sería el resto?"

- "Residuos. Sólo residuos".

lunes, junio 26, 2006

Máster

Hace mucho tiempo que mis amigas me venían diciendo que debía hacer un máster. Que era bueno para mí, que me iba a divertir, que iba a aprender... y que si la cosa se ponía mal, que me lo tomara como un estimulante porque seguro que me servía para ligar...

Total, que me puse manos a la obra. Después de mirar y remirar por todas las academias y escuelas de Madrid y alrededores, me decidí por el máster más completo que encontré: "Aprender a vivir". En él había demasiadas asignaturas, pero desde el primer día me fijé en "Para que las cosas te vayan bien, tú eres la que tienes que estar bien". Luego me interesé por los títulos. Enseguida quise el sobresaliente en "Sonríe y se feliz".


Después de muchos meses estudiando, me ha quedado para septiembre toda una maría, "No te tomes la vida como un culebrón, no merece la pena".

domingo, junio 25, 2006

¿Te apetece?

¿Quieres?

¿Puedes?


Algún día llegará el SÍ...

viernes, junio 23, 2006

Curiosidad...

¿Por qué no me lo cuentas?

martes, junio 20, 2006

Rarezas

El otro día ya dije que me sentía un poco rarita porque no me gusta el fútbol. Previas intenciones, algunos me pedisteis que hablara de mis otras rarezas. Ahí van algunas:

- No identificarme con ningún grupo establecido. Por ejemplo, entre mis amigos de derechas, soy de izquierdas. Entre los de izquierdas, soy de derechas.

- Me espantan lo que ahora se denominan "friquis". Nunca me sé ni las cancioncillas que cantan, ni conozco a determinados personajes, ni me interesa saber su rollo...

- A veces tiendo a aislarme. Me gusta estar sola. Y a veces, prefiero esa soledad.

- Las cosas me afectan exageradamente. Le doy mucha importancia a todo.

- No suelo beber alcohol. Y eso, a veces, me hace sentir rara...

- Me atraen los hombres por su coco más que por su fachada (y eso, ante algunas mujeres, es raro).

- Soy de las que pregunta: ¿Me quieres?

- Esperar cosas de la gente. No sé si es una rareza, pero a veces creo que me iría mejor si no esperara nada...

- Preferir la distancia corta a la larga.

- Decir la verdad.

Y algunas otras que no me atrevo a decir...
¿Será que de verdad soy rara?

lunes, junio 19, 2006

¿Solo o en pareja?

Deliciosa conversación a tres bandas. El tema a debate: ¿mejor solo o en pareja?
A mí, que soy una gran defensora de la pareja y de la vida en común, me dijeron que idealizo el amor, que sólo veo lo bueno y que se me olvida lo malo.

¿Qué le voy a hacer si veo que es mucho mejor la vida compartida que sola? Defiendo que hay que saber estar solo, que hay que pasar momentos de soledad y saber afrontarlos, pero me quedo con la vida en pareja... siempre y cuando se cruce "esa" persona.

Llevo más de dos años viviendo sola, después de tres en pareja. En ambas situaciones veo ventajas e incovenientes, pero sin duda alguna, a pesar de que para muchos vivir solo es mucho más apasionante, me quedo con la segunda opción.

¿Y tú?

viernes, junio 16, 2006

Intenciones

Que me mires con ojos de fuego.
Ser tus letras.
Que tus manos me financien un viaje al paraíso.
Ser tu boca.
Que me escuches sin oírme. Que me veas sin mirarme.
Ser ilusión.
Esperar tu aliento.
Cada segundo.
Que me respires con ansia.
Hacerme compañera de tu viaje.
Interminable.
Ser sol. Ser luna.
Tuyos.

Intenciones.
Deseos.

miércoles, junio 14, 2006

Minoría

A sabiendas de que hoy era un día en el que todos aquellos a los que no nos gusta el fútbol nos íbamos a sentir un poco invisibles, Blogger ha decidido un poco de tregua.
Justo el día en el que los que nos íbamos a mirar a la pantalla de la televisión queríamos mirar a la del ordenador.

Así son las cosas. ¿Casualidad? "Pero si las casualidades no existen". En cualquier caso, muy desafortunada.

Te he echado de menos, Blogger. Como se echa de menos al novio que coge un tren sin avisar para irse a hacer la mili ("eso sería hace años, bonita, porque ahora no se coge el tren sino el AVE, no se hace la mili, y mucho me temo que novios, lo que se dice novios, quedan pocos").

Y me he vuelto a sentir maravillosamente encantanda de formar parte de ese club de los raros a los que no nos gusta el fútbol y el mundial nos da, básicamente igual. Aunque he de reconocer que he pasado dos horas geniales sintiendo que parte del mundo se había detenido y que al menos mi teléfono me dejaba respirar.

Pero de mis rarezas hablaré otro día, que hoy no es el tema.

... Por cierto, enhorabuena a España. Siendo minoría, es imposible abstraerse de la realidad.

martes, junio 13, 2006

Palabras

Yo, que a menudo pienso que las palabras valen más que los silencios, siento que me faltan algunas.
Por dar y por recibir. Por leer pero también por escribir.
No es que me haya quedado muda ni sin ganas de decir o preguntar. Es que me estoy haciendo mayor. O que me importa lo que escucho.

Pero sí, es cierto. Me faltan palabras.
Cuando llego a casa, me pregunto por qué no hay cartas de amor en mi buzón en lugar de facturas.
Cuando abro el mail, ma asombro de que alguien piense que necesito más viagra que otro tipo de recomendaciones.
Cuando me siento en una maravillosa terraza en una maravillosa noche con una maravillosa luna, me quedo a la espera de alguna palabra... que tarda en llegar. O a veces, ni eso.

Sí, me faltan palabras. Aunque haya quien piense que me sobran preguntas.

sábado, junio 10, 2006

Caminos


Quizá no sepa a dónde voy.
Quizá no importe.

No creo que lo importante sea la meta.
Pienso más bien que lo fundamental es el camino.
Y en la capacidad que cada uno tenga para disfrutarlo.

viernes, junio 09, 2006

... A la primera

- "No me gusta esa música", le dije ayer a JC.
- "¿Por qué?", me pregunto él.
- "La música es como los hombres. O te gustan a la primera o no hay nada que hacer".

Un minuto después, y echando un vistazo a mi historial, me di cuenta de la estupidez que acababa de decir.

jueves, junio 08, 2006

Lavadora

Llevaba unos días observando que la lavadora no funcionaba bien. La ropa salía demasiado mojada, casi goteando.

Esta mañana, mientras me peinaba, me he encontrado una centrifugadora entre mis rizos.
Lo malo es que no encuentro el dichoso botón de off.

martes, junio 06, 2006

Gracias

Hay días en los que me apetece dar las gracias. Darlas públicamente, digo.
Ayer fue una de esas jornadas. Afortunadamente, hay mucha gente a mi alrededor que me hace sonreír y ver las cosas con mayor claridad.

Gracias a:

- Al responsable de esos mails mañaneros, cómplices y cariñosos, con dirección santanderina.
- Quien siempre me dice que estoy más guapa que nunca, por los pasillos de mi oficina.
- A ti, que me dices lo que quiero escuchar (de vez en cuando lo necesito).
- A ti también, que nunca me dices lo que quiero escuchar (supongo que también es necesario).
- A los que opináis en esta página.
- A quien me preguntó "¿Qué te pasa?"
- Al creador de un reino solar, por apacigüarme. Por mirarme.
- A una pequeña sonrisa que vi casi sin mirar.
- A los creadores, que me hicieron seguir soñando.
- A la vida.
- A la luna.

domingo, junio 04, 2006

Suerte

Un golpe de suerte.
Sólo eso es lo que necesito.

Pero ahora que lo pienso... ¿existe la suerte?

viernes, junio 02, 2006

Americanos...

Leo nosedonde que en EEUU los inquilinos pagan sus rentas con sexo. Como la mayoría de los titulares, tiene truco. Porque supongo que en cualquier caso serán Algunos inquilinos pagan sus rentas con sexo.

Esta es la noticia:

Los avisos de "techo por sexo" se publican en Internet. En Manhattan, por ejemplo, las chicas prefieren tener relaciones con los propietarios de los inmuebles en lugar de abonar 700 dólares por el alquiler de un cuarto. Esta modalidad se extiende a Los Angeles, San Francisco, Atlanta y Florida.

En Atlanta, un aviso ofrece una habitación gratis a cambio de "de sexo y trabajo liviano de oficina". En Los Angeles una habitación en una casa con piscina es gratis "para una chica que sea habilidosa y deseosa". Y en Manhattan un anuncio on line por un cuarto de 700 dólares al mes se puede reducir si es para una chica saludable dispuesta a ofrecer sexo.

"Normalmente alquilo la habitación por 600, pero si eres quisquilloso y deseoso de intercambiar el hacerte cosquillas por la diferencia en el alquiler, entonces trato hecho", escribe un homosexual que ofrece una habitación por 350 dólares al mes en el área de la bahía de San Francisco.


De todas formas, tampoco es tan antiguo. Aunque reconozco que lo de las cosquillas ha tenido su gracia…