martes, julio 31, 2007

Verano

Verano. Deseo.
La orilla de tu piel.
Las olas de dos cuerpos: el tuyo y el mío.
Lejos queda el otoño, cuando preferíamos ver la lluvia a través del cristal.
Ahora toca sudar. Las ganas asomando entre las sábanas cada día más inútiles.

Las estrellas están dentro, no fuera.
La luna nos mira. Y el sol, que hoy quema, sigue en mis ojos.

Deseo. Verano.
Calor en tu mirada.
Sombrillas son tus manos cuando me tocan, protgiéndome de lo que me da miedo, de lo que me asusta.
Las prisas acechándonos, pudiéndonos.
Y nosotros dejándonos ganar la partida. Aunque ninguno de los dos esté hecho para perder.
Pero hay cosas con las que no se puede luchar.

Verano.
Deseo.

11 comentarios:

JuanMa dijo...

Qué mejor forma de quemarse que con el sol de tus ojos...

Besos.

Danelí dijo...

(soy nueva por aquí)

Vengo del sur del sur
me cuesta imaginar verano en esta época en la que llueve más que nunca aquí abajo, pero el deseo es otra cosa.....y tras leer esta entrada llegó a mi memoria la voz de Drexler en su canción Deseo.

Besos y saludos nocturnos desde Chile.

Lunarroja dijo...

Danelí, bienvenida.
En menos de un mes yo también estaré en ese invierno. Bien cerquita, en tu país vecino, Argentina.

El búho rojo dijo...

Hay cosas contra las que no se puede luchar...

Hay cosas con las que no se puede perder...

Una imagen abierta con tus palabras...

L_Y_R dijo...

y... si... efectivamente hay cosas contra las que no se puede luchar... dulce rendición... :)

Anónimo dijo...

caliente caliente...

Fernando dijo...

en el deseo se dibuja el sabor preciso del estío..una luz, una llama y tu piel sintiendo el escalofrío de mi caricia...besos

Anónimo dijo...

Lunarroja me gusta mucho como escribis. Admiro tu capacidad para hacerlo (te agregué al messenger, espero que no te moleste). Saludos desde Argentina. Espero hablar pronto con vos. ¡Besos!

Anónimo dijo...

no luches, ríndete en la tumbona
feliz verano

MALEFICABOVARI dijo...

El verano es lo que tiene, te lo digo yo, que ando sufriendo las mismas ganas que tu de amor del bueno... y que esas sombrillas de las que hablas se cosan a mi cuerpo eternamente...
Un placer, volveré, besazo fuerte¡

Chus dijo...

Bonita metáfora.

Un beso