sábado, abril 18, 2009

La historia interminable

"Nos gusta estar juntos".
"Nos encanta dormir abrazados".
"Nos lo pasamos bien juntos".
"A los dos nos gusta hablar después".
"Nos fascina hacer el amor juntos".
"Nos gustamos".
"Nos queremos".
"Queremos saber el uno del otro".
"Nos deseamos".

A Rubita Feliz, cada una de estas frases le parecía una definición perfecta de eso de estar enamorados. No digamos todas juntas, pronunciadas dentro de la misma conversación, en apenas tres o cuatro minutos.
Rubita Feliz, en el mejor momento de su vida, aún no ha aprendido que quizá esté sobrevalorado eso de estar enamorado.

"Pero no estamos enamorados".
Gordito Disfrutón, tan locuaz él, no sabe lo que dice.
Creo que por diversos motivos, tampoco él ha aprendido lo que significa amar.

16 comentarios:

luna dijo...

MI Gordito Disfrutón nunca me decía que estaba enamorado(de mi), pero me decía que me apreciaba mucho ???? ¿¿¿¿¿¿¿?????¿¿¿¿¿¿¿

Yo aprecio a mucha gente, pero no me basta eso para hacer el amor con la gente que aprecio. A Gordito Disfrutón parece ser que le bastaba con apreciar...odio la palabra apreciar, me parece vacía.

El búho rojo dijo...

Me pregunto si el amor tiene fecha de caducidad... y si es así, ¿cuanto dura el amor??? Tal vez, depende de la calidad??? unos minutos??? una eternidad??? sólo un tiempo... indeterminado... pero tal vez... sí... quien sabe... tal vez...

Anónimo dijo...

Según veo a gordito disfrutón, le gusta lo mismo que a tí, pero con distinta intensidad.
Eso le permite a él disfrutar de todo eso con más rubitas y morenitas felices, y a tí no.

Por eso tú estás enamorada y él no.

Anónimo dijo...

Debería haber firmado una morenita feliz. Y ahora lo borrarás, porque para tú desgracia, tú si estás colada, rubita.

Lunarroja dijo...

No hay nada como poner el cepo para que salgan las ratas...

ybris dijo...

Las felices lo tienen más fácil para enamorarse que los disfrutones.
Como debe suceder en casos en que, como el amor y la amistad, el meollo de la cuestión es el grado de entrega.
Y es que el amor debe ser a enteras más que a medias.
Elaboré hace tiempo de una película que no recuerdo una definición de amor a partir de una conversación que salía en ella:
El amor es tomar a un perro desahuciado por lombrices intestinales y meterle el dedo en el culo todos los días hasta sacarle todas las lombrices y curarle.

Besos.

A.M. Valero Lite dijo...

Blanco y en botella, querida.
No podías haber definido más gráficamente ni con todo un tratado téorico-intelectual, a esos espíritus que no pueden amar (que no saben amar. o que no quieren amar) a pesar de tenerlo practicamente todo: deseo, cariño, ganas, atracción, sexo satisfactorio, complicidad y entendimiento.
Pero...ahhhhhh....les falta SENTIRSE ENAMORADOOOOOS...
Yo sigo sin poder comprenderlo.
Pero sabes qué? sospecho una incapacidad en esas personas, una incapacidad que hace que nunca se sentirán felices ni llenos por completo. O sea: unos inválidos emocionales. Con lo que el problema, el gran problema,en definitiva, es de ellos.

La última frase del comentario de Ybris me ha emocionado como pocas. Me la apunto en el alma y me la guardo en el corazón.

Un besazo, preciosa.

Anónimo dijo...

Que pena, Rubita, hubieramos sido amigas
Me gusta como escribes y también que seas féliz. El sentirse enamorado es algo tan personal,y tan necesario que ni la complicidad, el deseo, la amistad ni las tres juntas pueden igualarlo. El amor es todo eso asociado a la pulsión de necesitarlo como respirar. Y eso pasa cuando sientes que al quitarle las lombrices lo haces por tí. Eso es tan dificil, que encontrar el amor es muy complicado. Si gordito disfrutón sigue empeñado en encontrarlo, deseale que lo haga y no te enfades. Firmado una ratita, presumida eso sí, que a ti y a mí siempre nos han gustado los personajes de cuentos.

Caperucita Roja dijo...

Querida Cenicienta, déjales que disfruten.
Al fin y al cabo, son 5 años juntos ya!!!!!
Pero entérate de una vez por toda que es él, GD, quien quiere más... mucho más.

Por cierto, me sorprende que sigas a Lunarroja con tanta fidelidad.
Algún día me contarás por qué...

Joan Gallardo dijo...

¿Felicidad y amor son dos compañeros indisoluibles?

Cada vez lo tengo menos claro. Hay gente que presume de estar enamorada y que no es feliz. Por otro lado, gente que no es capaz de enamorarse y que sí parece feliz.

Si GD aún no ha aprendido lo que significa amar sólo nos deja 2 opciones: o se le enseña o no le interesa aprender.

Hasta otra Lunarroja!

Anónimo dijo...

La sigo porque me cae bien, porque escribe bien, porque la siento cercana y no me gusta nada que sufra.

Lunarroja dijo...

No me digas que lo próximo es un café...

Anónimo dijo...

No gracias, no me apetece mucho un café. GD dice que será en su boda. Estaremos allí para tirarle el arroz. Yo llevo cervatana para las dos, no te preocupes. jajajaja

Lunarroja dijo...

No va conmigo hacer daño. Jamás lo he hecho. Comparte tus ganas de venganza con otra persona.

Por cierto..., será en la playa.

Anónimo dijo...

Como eres verdadosa... y yo que creí que lo del café iba de buen rollo. Que pena, me caes bien.
GD debe estar muerto de risa.
Me pasa por meterme donde no me llaman.
Bye

Lunarroja dijo...

¿Cómo soy? Creo que me conoces un poco. No me dejo llevar por el mal rollo, ya ves. Lo del café era mera licencia artística, ni tan siquiera lo pruebo. Como sabes, siempre se nos dio mejor la Coca-Cola. Pero disfruto con las emociones fuertes.

Y te aseguro que no, que no se está riendo. Pero eso ahora da igual.

A todas nos pasan cosas por meternos donde no nos llaman. A veces es divertido. Otras, doloroso. Pero yo soy mujer de arriesgar, siempre de decir, nunca de callar.
Ya lo sabes, valiente.

Por eso esta vez he preferido responder. Debe ser que me estoy haciendo mayor. O que las cosas vuelven a nuestras vidas cuando menos las esperamos.

Mucha suerte.
Y me alegra saber que por fin me vuelve a gustar el color blanco.