Es curioso cómo nos acostumbramos. Sobre todo, rápido.
A lo bueno. A lo malo. A lo regular.
A la vida.
A veces sin saber por qué, las cosas cambian.
A veces muy rápido.
A veces demasiado.
Sin saber por qué.
Ya me he acostumbrado. ¿A qué?
martes, septiembre 13, 2005
Costumbres
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5 comentarios:
Supongo que al cambio, a la continua improvisación de la vida y a adaptarte a ello con facilidad... ;)
Nos adaptamos a los cambios (buenos, malos, regulares) y seguimos, sin tiempo casi para reflexionar, no hay tiempo: nueva situación, hay que continuar.
Yo odio las costumbres, me aduerman, me paralizan, no me gustan nada. ¿Será esto malo?
¡Qué triste es acostumbrarse a la mediocridad!
Sí que es triste, sí. ¿Pero desde cuándo tienes tú nada que ver con la mediocridad, luna lunera?
Te hacía en cuarto creciente, cualquier día llena.
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